Tardíos planes de viaje: 'Cuando reservas con anticipación, al llegar ya no tienes el mismo entusiasmo'

Tardíos planes de viaje: 'Cuando reservas con anticipación, al llegar ya no tienes el mismo entusiasmo'

En la era digital, donde la planificación y la reserva de viajes se han vuelto más accesibles que nunca, un fenómeno curioso ha sido detectado entre los viajeros. La anticipación, que inicialmente genera una gran emoción y expectación, puede convertirse en una desilusión cuando finalmente llega el momento de disfrutar del viaje. Según expertos, reservar con demasiada anticipación puede hacer que la emoción y el entusiasmo inicial se desvanezcan, dejando a los viajeros con una sensación de ya visto, ya vivido. En este artículo, exploraremos las razones detrás de este fenómeno y cómo los viajeros pueden recuperar la emoción en sus planes de viaje.

La tendencia de viajar en el último momento se hace cada vez más popular en España

Cada vez más españoles están optando por decidir el destino y actividades de sus vacaciones a última hora. Según una encuesta elaborada por la web de comparación de vuelos Skyscanner, un 20% de los viajeros españoles se ha presentado alguna vez en el aeropuerto sin un destino decidido, reservando un vuelo en ese mismo momento, y un 30% aseguró haber reservado sus vacaciones con menos de cuatro días de antelación.

Reservar en el último minuto, una forma de disfrutar más de los viajes

Berta Llanas, una médica residente de Barcelona, es una de ellas. Después de una guardia especialmente dura, decidió que tenía que irse de viaje. El problema era que tenía solo dos días para organizarlo y ni siquiera se había planteado a dónde quería ir. Entró en Google esa misma noche, buscó el vuelo más asequible a un destino que le resultara interesante y, dos días después, estaba en Albania.

Desde hace cinco años, lo único que hago es viajar a última hora y he descubierto que la sensación de viajar cuando tú lo necesitas es lo que más me llena, me hace sentir mejor y hace que disfrute más de los viajes, declara Llanas.

El reto de coordinar un viaje 'last minute': apurar al máximo para disfrutar

Otro estudio más reciente, elaborado por la agencia de viajes WeRoad, ha señalado a los millennials -los nacidos entre finales de los años 80 y el año 2000- como los más propensos a este tipo de viajes. El 55% de los millennials españoles reservarán last minute sus vacaciones de verano, según esta encuesta.

Este año tenemos la suerte de que todavía hay muchos destinos con vuelos a buen precio, sobre todo para septiembre, pero también para agosto, por ejemplo, se puede ir a Nueva York, Grecia está bien, Albania o Nápoles están bien, declara Laura Pérez, directora general en España del touroperador WeRoad.

La aventura de viajar sin planes: 'Es un empoderamiento brutal'

Viajar solo, por necesidad o por voluntad, es una experiencia que puede ser emocionante y liberadora. Berta Llanas, que empezó como simple usuaria de la agencia WeRoad, pero acabó también ocupando el rol de coordinadora hace dos años, lo describe como un empoderamiento brutal.

Es como el alma del del tour porque no son guías al uso, es gente que tiene sus propios trabajos y WeRoad les paga los viajes y unas dietas y, al final, son grupos en los que está todo organizado, pero hay una parte flexible y ahí es donde entra mucho en juego el coordinador, explica Pérez.

El arte de viajar en el último momento: flexible y emocionante

La flexibilidad es clave cuando se viaja en el último momento. Chema Leal, un psicólogo de startups de 32 años de Barcelona y coordinador de WeRoad, admite que él mismo suele organizar sus viajes con tiempo, aunque, como psicólogo, ve una gran ventaja en hacerlo en el último momento.

Te permite viajar mucho como el momento de sensación de vida que tengas no la parte emocional, declara Leal.

La experiencia de viajar sin planes puede ser emocionante y llevar a descubrir lugares y experiencias que no hubieran sido posibles de otra manera. Berta Llanas lo experimentó recientemente en un viaje a Islandia, donde tuvieron que buscar una alternativa al Blue Lagoon y encontraron un lugar aún más bonito y menos turístico.

Tienes que tener un poco la mente abierta porque pueden pasar cosas y tienes que ser más flexible, tener una mentalidad positiva, relata la catalana.