Leon Marchand, de oro en oro: consigue título olímpico en 200 estilos individuales
En un momento histórico para el deporte francés, Leon Marchand se coronó campeón olímpico en la prueba de 200 estilos individuales en los Juegos Olímpicos. El joven nadador francés de 20 años logró conquistar el título más preciado en el mundo del deporte, sumando su segundo oro en la competencia. Con este triunfo, Marchand se convierte en uno de los nadadores más destacados de la actualidad, demostrando su dominio y consistencia en el agua. La hazaña de Marchand es un orgullo para Francia y un ejemplo de dedicación y perseverancia para todos los deportistas.
Leon Marchand, el rey de las piscinas, conquista título olímpico en estilos individuales
El francés Leon Marchand se ha proclamado campeón olímpico en los 200 metros estilos individuales en los Juegos Olímpicos de París 2024, sumando su cuarto título dorado en estos Juegos.
Marchand dominó la prueba a su antojo, sin dar opciones a sus rivales, que se limitaron a pelear por la medalla de plata y bronce mientras el galo luchaba contra sí mismo. y contra la plusmarca mundial, en poder del estadounidense Ryan Lochte desde el 2011.
El campeón se quedó a las puertas de batir esa marca, a tan solo seis centésimas de la marca del americano, pero sí superó el récord olímpico de Michael Phelps. Pocos importó que el chino Shun Wang, campeón hace tres años en Tokio, fuera el primero en tomar la delantera y completase la posta de mariposa en primera posición con una ventaja de siete centésimas sobre el francés de 22 años.
La habilidad de Marchand en el volteo llevó a la locura a la grada de La Défense, que comenzaba a presagiar no solo la victoria, sino la posibilidad de que Marchand adornase su cuarto oro con un récord del mundo.
Con su perseguidores a un mundo, Marchand emprendió una frenética carrera contra el crono. Pero ni así pudo evitar que se le escapase por centésimas, tras tocar la pared en un tiempo de 1:54.06 minutos, suficiente para arrebatar a Michael Phelps el récord olímpico que poseía desde los Juegos de Pekín 2008 con una marca de 1:54.23.
Este hecho ratificó la condición de Marchand como el legítimo heredero de Phelps y el nuevo icono de la natación mundial. Fue escoltado en el podio por el británico Duncan Scott, plata, y el chino Shun Wang, bronce.
Por otro lado, la nadadora australiana Kaylee McKeown completó, como hiciese en Tokyo 2020, el doblete de la distancia de espalda al imponerse en la final también de los 200 metros, con nuevo récord olímpico de 2:03.73.
Finalmente, en la tercera gran final de la jornada en La Défensa, también hubo victoria australiana a cargo de Cameron McEvoy, que se impuso en los 50 metros libres por 21.25 segundos.
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