El shock en internet: ¿es seguro lavar las frutas y verduras en el lavavajillas? Conoce los peligros de esta práctica que ha generado una gran polémic

En las últimas semanas, una práctica cotidiana ha generado una gran polémica en las redes sociales y foros de conversación en línea. Se trata de lavar las frutas y verduras en el lavavajillas, una costumbre que, a priori, puede parecer inocua y hasta recomendable para garantizar la higiene de los alimentos. Sin embargo, esta práctica ha demostrado ser muy peligrosa, ya que puede tener consecuencias negativas para la salud y el medio ambiente. En este artículo, vamos a profundizar en los ruegos y peligros que conlleva esta práctica y a analizar si realmente es seguro lavar las frutas y verduras en el lavavajillas.

La tendencia peligrosa que ha generado polémica: ¿lavar frutas y verduras en el lavavajillas es un riesgo para tu salud?

No hay ninguna duda de que estamos inmersos en plena era de las redes sociales y que las tendencias virales surgen a diario desde cualquier rincón del mundo, moviéndonos con ellas. Así, recientemente, un nuevo truco o 'tip' ha captado la atención de muchas personas tanto en España, como fuera: lavar frutas y verduras en el lavavajillas.

De primeras puede sonar como una solución ingeniosa para ahorrar tiempo en hacer esta tarea, sin embargo, esta tendencia en las redes ha despertado una gran polémica entre los expertos debido a los riesgos que conlleva, recomendándonos no hacer uso de este electrodoméstico para lavar fruta o verdura.

Los riesgos de lavar fruta y verdura en el lavavajillas

A pesar de que las tendencias virales relacionadas con la cocina suelen servir de ayuda, no siempre es así. De hecho, estos son los riesgos alertados por los expertos en seguridad alimentaria respecto al 'tip' de lavar los alimentos frescos en el lavavajillas:

Restos de productos químicos: los detergentes que se usan en lavavajillas están compuestos de productos químicos muy fuertes para que puedan descomponer los restos de comida o grasa y dejar la vajilla completamente limpia. Sin embargo, estos detergentes no son seguros para el consumo humano. Incluso después de un ciclo de enjuague, pueden quedar residuos de estos productos químicos en las frutas y verduras, lo cual puede ser peligroso para la salud si se ingieren, pudiendo provocar problemas en el aparato digestivo y otras complicaciones.

Afecta a las propiedades de la fruta y verdura: los lavavajillas utilizan agua a una temperatura muy elevada y trabajan con chorros de alta presión para poder desincrustar la suciedad de los platos, vasos y utensilios, pero estas condiciones no son nada convenientes para alimentos frescos. El agua tan caliente puede hacer que las frutas y verduras se cocinen, pierdan sus nutrientes esenciales y se vuelvan blandas o incluso insípidas. Por otro lado, los chorros a tanta presión pueden destrozar los alimentos, haciéndolos incomestibles.

Contaminación cruzada: este es uno de los peligros sobre los que advierten los expertos, porque los lavavajillas están diseñados para limpiar platos y utensilios que han estado en contacto con restos de alimentos, grasas y aceites, lo que significa que pueden tener bacterias y comida en su interior. Por lo tanto, al lavar frutas y verduras ahí, existe un alto riesgo de que estos residuos se transfieran a los productos frescos.

Cómo lavar fruta y verdura de forma segura

Por suerte, y para no tener que recurrir a técnicas virales, pero poco recomendadas por expertos, existen otras tendencias en redes sociales que sí que son seguras y eficaces para lavar y desinfectar la fruta y la verdura.

Por ejemplo, se puede utilizar vinagre y agua para lavar los alimentos frescos. Tan solo hay que mezclar una parte de vinagre por tres de agua y sumergir la fruta o la verdura durante unos minutos para que las propiedades desinfectantes del vinagre hagan efecto. Después, lavamos los alimentos con agua y ya tenemos los alimentos perfectamente limpios y listos para consumir.

Por otro lado, el método más rápido, pero igualmente eficaz y seguro, consiste en lavar los alimentos con agua corriente, frotándolos con las manos o con un cepillo suave para quitar las imperfecciones, tierra o suciedad y dejarlos a punto para comer.