En un giro inesperado en el caso que ha conmocionado a la opinión pública noruega, se han revelado nuevos detalles sobre el incidente en el que el hijo de la reina noruega Mette-Marit, Marius Borg Høiby, agredió a una joven en una fiesta privada. Según fuentes cercanas a la investigación, se encontró un cuchillo clavado en la pared del piso donde tuvo lugar el altercado, lo que ha generado gran inquietud entre los ciudadanos y ha llevado a cuestionar la versión oficial de los hechos. A continuación, se presentarán los detalles más impactantes de este caso que ha sacudido la monarquía noruega.
Nuevo detalle explosivo en el caso de Marius Borg: un cuchillo clavado en la pared del piso
La presunta agresión cometida por Marius Borg, hijo de la princesa Mette-Marit de Noruega, sigue arrojando datos sobre el alcance de la misma. La policía noruega ha informado que la presunta agredida mantiene una relación con el joven, aunque su identidad sigue siendo un misterio.
Imágenes impactantes publicadas por la revista Se og Hør muestran el apartamento donde tuvo lugar el suceso, con una lámpara rota y un cuchillo clavado en la pared. Estas imágenes han generado gran conmoción en los medios y en la opinión pública.
Grabaciones de audio y testimonios de exnovias revelan un patrón de violencia
La policía noruega ha obtenido grabaciones de audio en las que Marius se dirige a la presunta víctima y la amenaza con quemar su ropa y sus pertenencias. Estas grabaciones han sido clave en la investigación y han llevado a la policía a sospechar de un patrón de violencia en el comportamiento de Marius.
Una exnovia de Marius, Juliane Snekkestad, ha salido a la luz para acusar al joven de haberla maltratado psicológica y físicamente durante su relación de cuatro años. Snekkestad ha publicado un texto en sus redes sociales en el que denuncia la violencia que sufrió a manos de Marius.
En primer lugar, me gustaría enviar un cálido recuerdo a las personas afectadas por el caso, escribe Snekkestad. Ya no quiero permanecer en silencio. Porque, en realidad, ya no puedo seguir callada. La exnovia de Marius también denuncia que la violencia psicológica que sufrió fue más brutal para mí.
Marius, de 27 años, sigue sin prestar declaración y se encuentra bajo la protección de su madre y padrastro en su domicilio. A pesar de ser muy activo en redes sociales anteriormente, ahora guarda un exquisito silencio sobre lo que le está sucediendo.
Si se confirma la agresión, Marius podría enfrentar un año de cárcel por un delito de lesiones corporales, y hasta seis años si se califican como graves las lesiones denunciadas.
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