La extraña norma que impone Shakira a sus empleados en su hogar de Barcelona: 'No tocan nada que haya tocado Clara Chía'

La extraña norma que impone Shakira a sus empleados en su hogar de Barcelona: 'No tocan nada que haya tocado Clara Chía'

La cantante colombiana Shakira ha generado gran revuelo en los medios de comunicación con una extraña norma que impone a sus empleados en su residencia en Barcelona. Según fuentes cercanas a la estrella, la orden es clara: 'No tocan nada que haya tocado Clara Chía', refiriéndose a la exnovia de su pareja, Gerard Piqué. Esta sorprendente restricción ha generado curiosidad y especulación entre los fans y los medios de comunicación, quienes se preguntan qué puede estar detrás de esta inusual medida de seguridad. ¿Qué secreto puede esconder la casa de Shakira y qué relación tiene con la exnovia de Piqué?

Aki, la casa de Shakira en Barcelona, donde no tocan nada que haya tocado Clara Chía

La cantante colombiana Shakira y su ex pareja, el futbolista Gerard Piqué, siguen compartiendo la mansión en la que vivían en Esplugues de Llobregat, a pesar de que ya no están juntos. La vivienda, que actualmente está a la venta, es utilizada por ambos cuando vuelven a Barcelona, pero con una condición muy específica.

Según reveló Miquel Valls en el programa Espejo Público este jueves, Shakira exige a su personal que tiren todas las sábanas, cojines, mantelería y cubertería cada vez que se queda en la casa, y obliga a comprarlas de nuevo. La razón detrás de esta drástica petición es que la cantante no quiere tener ningún contacto con nada que haya tocado Clara Chía, la nueva pareja de Gerard Piqué.

La presentadora del programa, Susanna Griso, se mostró sorprendida por esta condición y expresó su opinión al respecto. No entiendo que compartan la casa. A mí me parece una chorrada, aparte de una frivolidad (.) Que lo guarde en el armario y ya lo tiene para la próxima vez, dijo.

La vivienda en cuestión, situada en la urbanización Ciutat Diagional de Esplugues de Llobregat, lleva tiempo a la venta. Inicialmente, la expareja fijó el precio en 14 millones de euros, pero no han conseguido comprador aún. Según Valls, Gerard Piqué propone bajar el precio a 7 millones de euros, que según él es el precio real de la vivienda, pero Shakira se niega a hacerlo.

Dice que no, que quiere mantener los 14 millones, declaró Valls. Según el entorno, Shakira quiere fastidiar, no quiere vender la vivienda, no quiere bajar el precio y quiere estar ahí presente. Es evidente que la cantante colombiana no está dispuesta a ceder en su posición, ni siquiera en lo que respecta a la venta de su casa.

Es importante destacar que Shakira también tiene otra propiedad en Miami, que recientemente vendió por 15 millones de euros, gracias a la ayuda de su amigo y cantante Marc Anthony. Sin embargo, la situación con su casa en Barcelona es muy diferente, y parece que la cantante no está dispuesta a sacrificar su comodidad y su espacio personal por una venta.