En el norte de Alemania, oculta entre las ciudades más populares, se encuentra Lübeck, un tesoro escondido que espera ser descubierto. Esta ciudad histórica, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1987, esconde un pasado rico y fascinante, que se refleja en sus impresionantes monumentos y edificios. Desde el castillo medieval hasta la puerta medieval, cada rincón de Lübeck cuenta una historia que nos transporta a una época de caballeros y príncipes. Prepárese para descubrir los secretos de esta ciudad emblemática, que ha sabido conservar su esencia a lo largo de los siglos.
Descubre el tesoro escondido: Lübeck, la ciudad alemana con un castillo, una puerta medieval y una historia rica
En Alemania se pueden encontrar algunas de las ciudades más apasionantes de toda Europa, como Berlín, Colonia o Múnich, aunque en el país germano hay otras muchas urbes quizás no tan conocidas en España que son igual de fascinantes. Ese es el caso de Heidelberg, una preciosa población a orillas del río Neckar que está a tan solo una hora tanto de Frankfurt como de Stuttgart y que es una de las grandes joyas ocultas alemanas.
Esta ciudad de unos 150.000 habitantes no solo es una verdadera maravilla arquitectónica, sino que también es uno de los principales centros universitarios de toda Alemania, lo que convierte a Heidelberg en una vibrante urbe repleta de vida pero en la que también se combinan impresionantes edificios con siglos de historia y un entorno natural único. Por ello, no dudes en añadirla como parada en el itinerario de tu viaje por el país germano.
La fascinante arquitectura de Heidelberg
Aunque hay pruebas de presencia humana en la zona desde hace más de 600.000 años, fue durante la Edad Media cuando se empezó a construir el Heidelberg que se conoce hoy en día. Todo comenzó con la edificación de su majestuoso castillo, una impresionante fortaleza de principios del siglo XIII erigida en la colina Königstuhl y desde la cual domina toda la urbe. De estilo renacentista, es una de las construcciones de esta índole más importantes que se pueden encontrar en Alemania.
Para llegar al centro histórico de Heidelberg, tendrás que cruzar el precioso puente antiguo (o Puente Karl Theodor) que se erige sobre el río Neckar, para justo después atravesar otro de los emblemas de la urbe alemana, su puerta medieval. Construida en el siglo XV, originalmente formaba parte de las murallas de la ciudad, y tras una restauración reciente da la bienvenida a todos los turistas con todo su esplendor.
Un paseo por la ciudad
Tras cruzar la magnífica puerta medieval, podrás pasear por pintorescas calles como la Hauptrasse, la avenida peatonal más larga de Alemania, y contemplar otros magníficas construcciones como la Iglesia del Espíritu Santo, la de los Jesuitas o la de la Providencia, así como otros edificios de arquitectura barroca que dan a esta ciudad de un encanto inigualable.
Heidelberg atrajo a centenares de pensadores, poetas y artistas a finales del siglo XVIII, por lo que se convirtió en uno de los principales centros del romanticismo alemán durante aquella época, lo acentúa aun más la espectacularidad de este increíble enclave situado en el estado federado de Baden-Wurtemberg.
Un entorno natural único
Heidelberg está rodeada de montañas repletas de vegetación, por lo que podrás adentrarte en parajes de ensueño después de haber recorrido todos y cada uno de los maravillosos rincones de la ciudad. Por ello, y a pesar de que no sea una de las ciudades de Alemania con mayor renombre, es una magnífica idea para hacer un pequeño viaje.
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