Una organización ecologista acusa a Gibraltar de violar la legislación europea al importar materiales españoles para rellenar el Peñón de Gibraltar
La controversia ambiental ha vuelto a saltar a la palestra en el Peñón de Gibraltar, debido a que una organización ecologista ha presentado una denuncia formal contra el gobierno de Gibraltar por presunta violación de la legislación europea. Según la acusación, Gibraltar ha estado importando materiales españoles, incluyendo escombros y residuos, para rellenar el peñón y expandir su superficie. Esta práctica, según la organización, atenta contra la biodiversidad y el medio ambiente de la zona, y viola las normas de la Unión Europea en materia de protección del medio ambiente. La denuncia ha generado un gran revuelo en la comunidad internacional, y se espera que la Comisión Europea investigue este asunto.
Verdemar denuncia a Gibraltar por violar legislación europea con importación de piedras españolas
La asociación conservacionista Verdemar Ecologistas en Acción ha denunciado ante la Comisión Europea que el Gobierno de Gibraltar está importando piedras de Casares (Málaga) para ejecutar las obras de urbanización en los rellenos de la cara este del Peñón de Gibraltar.
Según la denuncia, camiones procedentes de las canteras de Casares están proporcionando el material de piedra de escollera necesario para acometer las obras, que se desarrollan en una Zona de Especial Conservación (ZEC) del Estrecho Oriental.
Verdemar asegura que las obras en la zona de Eastside para ganar terreno al mar requerirán de 50.000 toneladas de piedras de los espigones de la localidad malagueña y que la actuación urbanística del Gobierno de Gibraltar está derivando en un vertedero de escombros y de “todo tipo de residuos”.
Además, los ecologistas señalan la expansión del Peñón sobre las aguas limítrofes, que, según las averiguaciones de una barcaza de investigación del colectivo, ocuparán 20 hectáreas más del frente litoral.
Por todo ello, Verdemar ha denunciado estos hechos ante la Comisión Europea, argumentando que la importación de piedras españolas para urbanizar el Peñón viola la legislación europea.
La denuncia de Verdemar es un llamado de atención a la Unión Europea para que intervenga y proteja el medio ambiente y los recursos naturales de la región.
Esperamos que la Comisión Europea tome medidas efectivas para investigar y resolver esta situación, que atenta contra la integridad del medio ambiente y el patrimonio natural de la región.
La protección del medio ambiente y la defensa de los recursos naturales es un deber compartido entre todos los países miembros de la Unión Europea, y es necesario que se tomen medidas para evitar este tipo de actuaciones que ponen en peligro la biodiversidad y el equilibrio ecológico.
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