Sánchez busca un candidato fuerte para suceder a Ribera en el Congreso y respaldar su plan de transición ecológica

Sánchez busca un candidato fuerte para suceder a Ribera en el Congreso y respaldar su plan de transición ecológica

En un movimiento estratégico para consolidar su legado político, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, busca un candidato fuerte para suceder a Teresa Ribera en el Congreso de los Diputados. La ministra de Transición Ecológica ha sido un pilar fundamental en la implementación del plan de transición ecológica del Ejecutivo, y su sucesor deberá tener la capacidad de liderar este proceso con firmeza y determinación. La elección de un nuevo candidato será clave para garantizar la continuidad y el éxito de este ambicioso proyecto, que busca transformar la economía española hacia un modelo más sostenible y respetuoso con el medio ambiente.

Sánchez busca candidato fuerte para suceder a Ribera y respaldar plan de transición ecológica

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, enfrenta el desafío de encontrar un perfil político y técnico que lidere la transición ecológica española, tras la marcha de la actual vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, a la Comisión Europea.

Quién será el próximo ministro de Transición Ecológica: ¿Sara Aagesen o otra candidata?

Todo apunta a que será una mujer quien supla a Ribera, que llega a Bruselas con superpoderes como vicepresidencia ejecutiva para una Transición Limpia, Justa y Competitiva y comisaria de Competencia. Distintas fuentes del sector energético coinciden en el deseo de que sea la actual secretaria de Estado de Energía, Sara Aagesen, quien escale a ministra, aunque lo ven poco factible.

Señalan a la exconsejera para la Transición Ecológica y Sostenibilidad de Extremadura Olga García como una de las candidatas. Sea como sea, hay pocos nombres que aúnen el currículum de Ribera y a la misma vez dispongan de la entereza suficiente para arremangarse y bajar al barro político.

El reto de Sánchez: encontrar un perfil político y técnico para liderar la transición ecológica española

La marcha de Ribera deja al Ejecutivo sin uno de sus rostros más carismáticos y deja a Sánchez ante la dicotomía de elegir un perfil de corte más político que sepa pelear en el Congreso de los Diputados o uno más técnico que dirija a España a cumplir los compromisos climáticos fijados en la hoja de ruta a 2030.

Ribera, una de las caras más visibles del Gobierno desde 2018, es conocida por su compromiso con el ecologismo y las energías renovables. Entre sus logros destacan la eliminación del impuesto al sol, la Ley de Cambio Climático y Transición Energética y la excepción ibérica.

Además, se ha enfrentado a una de las mayores crisis energéticas de la historia y se ha empleado a fondo en la transformación de un sistema energético que vira indudablemente a lo renovable. Muy beligerante contra la energía nuclear y los combustibles fósiles, Ribera es una de las escasas ministras que sobreviven desde el primer Ejecutivo de Sánchez.

Sara Aagesen, la candidata natural que anhela el sector, llegó a la Secretaría de Estado de Energía en 2020 con un perfil puramente técnico y como la primera mujer en ocupar este puesto. Desde entonces, ha sido la principal interlocutora entre el sector y el Gobierno y ha participado en la consecución de la excepción ibérica, en el Plan General de Residuos Radiactivos, entre otras.

La decisión final solo depende del propio Sánchez y siempre puede saltar la sorpresa. Sin embargo, es claro que el próximo ministro de Transición Ecológica deberá tener un perfil político y técnico que lidere la transición ecológica española y cumpla los compromisos climáticos fijados en la hoja de ruta a 2030.