Un legado del pasado: ¿Cómo sigue vivo el teletexto en España y cuándo se extinguirá definitivamente?

Un legado del pasado: ¿Cómo sigue vivo el teletexto en España y cuándo se extinguirá definitivamente?

A pesar de la generalizada transición a la television digital y la informática en línea, el teletexto sigue siendo una parte integral de la experiencia televisiva en España. Desde su introducción en 1990, este servicio ha proporcionado a los espectadores información actualizada y diversa, desde noticias y deportes hasta programación televisiva y anuncios clasificados. Sin embargo, con la creciente popularidad de las plataformas digitales, surge la pregunta: ¿Cuánto tiempo más seguirá vivo el teletexto en nuestro país? En este artículo, exploraremos el legado del pasado que es el teletexto en España y analizaremos los factores que han permitido su supervivencia, así como las razones por las que su extinción definitiva puede ser solo cuestión de tiempo.

Años de teletexto: ¿cómo sigue vivo en España y cuándo se extinguirá definitivamente?

El teletexto llegó a España en la década de los ochenta, once años después de su creación en la BBC bajo el nombre de Ceefax. Este sistema revolucionó la pequeña pantalla, ofreciendo mensajes escritos y gráficos a través de índices, que permitían descubrir la programación de cada cadena, el resultado de un sorteo de lotería e incluso el horóscopo.

A día de hoy, puede parecer algo obsoleto, teniendo en cuenta que solo hay que buscar en Google para obtener información. Sin embargo, la realidad es que el teletexto sigue en activo en España, siendo el único país europeo, junto con Alemania, en el que se mantiene.

Historia y origen del teletexto

En mayo de 1988, todo español que contara con un decodificador o una televisión que lo trajese incorporado, podía empezar a consultar el teletexto. Por aquel entonces solo existían dos canales, hasta la llegada de las autonómicas y posteriormente de Antena 3 en 1990, por lo que se decidió nombrar a este sistema como ‘Telecinco’.

Una curiosidad que pocos conocen, pues fue así durante poco tiempo; cuando llegó la cadena de Mediaset, se prefirió renombrarlo como teletexto. Para implementarlo, Televisión Española gastó 500 millones de pesetas, unos 3 millones de euros, según El Economista.

¿Cómo se utilizaba?

Para utilizar el teletexto en sus orígenes se seguía el mismo procedimiento que se mantiene hoy en día. La página principal correspondía al número 100 y a partir de ahí, solo había que introducir con el mando de la televisión el número de tres cifras correspondiente a cada servicio.

Para cambiar de sección dentro de una página, se empleaba un código de colores también disponible a través del mando a distancia. Actualmente, se puede hacer de la forma tradicional o consultarlo a través de Internet (lo que demuestra que ambas cosas pueden coexistir).

La sorprendente cifra de usuarios

La sorpresa llega cuando se conoce que, de un sistema que se creía completamente muerto, son 2 millones de personas las que lo siguen utilizando, según datos de un estudio de TVE. El mismo confirma que el 99,3% de los hogares españoles todavía tiene teletexto y sus usos más comunes van desde consultar el horóscopo al intercambio de mensajes.

El teletexto, ¿condenado a desaparecer?

Si España siguiese el ejemplo de otros países, es probable que más pronto que tarde el teletexto terminase desapareciendo. Sin embargo, con las plantillas dedicadas al teletexto cada vez más reducidas y los procesos cada vez automatizados, el coste podría llegar a ser rentable, gracias a la mínima inversión publicitaria que todavía hoy se mantiene.

Hay que destacar, además, que este sistema ofrece un servicio esencial para las personas sordas, pues desde sus inicios ha permitido subtitular programas, series y películas. Si bien, con la aparición de nuevas aplicaciones que facilitan la accesibilidad para las personas sordas, así como las televisiones más modernas, el futuro del teletexto es incierto.