En un emotivo momento en el programa de televisión 'Y ahora Sonsoles', el actor Àngel Llàcer compartió una conmovedora confesión que conmocionó a la presentadora Ana Obregón. Con lágrimas en los ojos, Llàcer reveló una experiencia personal muy difícil, en la que tuvo que enfrentar la cruel realidad de que su vida estaba en peligro. La confesión que hizo llorar a Ana Obregón fue cuando admitió que no me atreví a decirle a mi hijo que no iba a vivir, una frase que revela la profundidad de su dolor y la angustia que sintió en aquel momento. Esta emotiva revelación nos permite vislumbrar la faceta más humana de un personaje público y nos hace reflexionar sobre la fragilidad de la vida.
Ana Obregón se conmueve al escuchar la confesión de Àngel Llàcer en 'Y ahora Sonsoles'
Hace unos meses, la vida del cómico Àngel Llàcer sufrió un drástico parón debido a una infección intestinal aguda provocada por una bacteria con la que se infectó en Vietnam. Su estado de salud fue tan crítico que llegó a despedirse de sus seres queridos, dado el desfavorable pronóstico que enfrentaba.
Este lunes, Llàcer intervino a través de una llamada telefónica en el programa 'Y ahora Sonsoles', donde también se encontraba Ana Obregón. El cómico compartió un momento emotivo al recordar su experiencia: No quería irme sin decir adiós. Intentaba animar a mi madre, aunque estaba decidido a morirme.
Las palabras de Llàcer resonaron con fuerza en la intérprete, quien vivió la pérdida de su hijo, Álex Lequio, debido a un cáncer. Ana Obregón se emocionó al escuchar la confesión del cómico y respondió con voz entrecortada y los ojos llorosos: Perdóname. Es muy difícil para mí. Ese momento con tu madre lo entiendo perfectamente. A mi hijo no me atreví a decirle que no iba a vivir.
La tertuliana compartió una valiosa lección que ha aprendido tras el fallecimiento de su primogénito: Hay que coleccionar esos momentos con las personas que quieres. Vamos muy rápido. Coleccionamos cosas, pero lo que realmente importa son esos momentos.
Finalmente, Ana Obregón no pudo reprimir su emoción y cubrió su rostro con las manos para ocultar las lágrimas. Las lágrimas sanan el alma. Cada vez que lloro es porque sé que la vida es única. Por favor, estad con las personas que queréis y dedicadles tiempo. Cuando te vas, es lo único que te llevas, concluyó.
La emotiva intervención de Ana Obregón en 'Y ahora Sonsoles' nos recuerda la importancia de valorar cada momento con nuestros seres queridos y no dar nada por sentado.
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