En la era digital, las redes sociales pueden ser un reflejo de las tendencias y prácticas saludables que se vuelven virales entre los usuarios. Uno de los últimos ejemplos es el consumo de arcilla como remedio para mejorar la inmunidad, un hábito que ha generado un gran interés en la plataforma de TikTok. Lo que puede parecer una nueva moda en realidad tiene raíces históricas, ya que este tratamiento se practicaba en el siglo XVII. Este curioso hábito ha generado un debate en torno a su eficacia y seguridad, y es importante analizar las razones detrás de su creciente popularidad.
La extraña moda de comer tierra: ¿Un peligro para la salud o un tratamiento efectivo?
Una tendencia sorprendente ha tomado fuerza en TikTok, donde muchas personas han comenzado a compartir los supuestos beneficios de comer barro y arcilla. Sin embargo, esta práctica, conocida como geofagia, ha generado preocupación entre los expertos en salud.
La historia detrás de la bucarofagia
En el Madrid del Siglo de Oro, la nobleza practicaba la bucarofagia, una técnica que les permitía evitar embarazos, adelgazar o incluso alcanzar usos alucinógenos. Sin embargo, esta práctica cayó en desuso debido a los riesgos que conllevaba, como la hinchazón y endurecimiento del vientre, e incluso la intoxicación mortal.
Los supuestos beneficios de comer tierra
Las usuarias de TikTok que promueven esta moda afirman que la tierra contiene microorganismos como la Mycobacterium vaccae, que pueden ayudar a mejorar el sistema inmunitario y reducir el estrés. Algunas incluso animan a sus seguidores a dar a sus bebés de comer suelo boscoso para ayudarles a mejorar su sistema inmunológico.
La realidad detrás de la geofagia
Sin embargo, la realidad es que la geofagia es un trastorno alimenticio que puede convertirse en adicción, conocido como pica. Los expertos han advertido a los usuarios que no sigan esta moda, ya que no hay evidencia científica que respalde sus supuestos beneficios.
La venta de arcilla preparada en Internet
Además, aquellos que venden arcilla preparada para su consumo en Internet no lo hacen de manera autorizada ni cumpliendo con los requisitos de higiene y salud. Esto puede conllevar graves riesgos para la salud de los consumidores.
Conclusión
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