- El Tribunal de Cuentas advierte que la falta de recursos humanos obstaculiza la vigilancia efectiva de bienes confiscados a organizaciones delictivas
- Falta de recursos humanos obstaculiza la vigilancia de bienes confiscados a organizaciones delictivas, advierte el Tribunal de Cuentas
- Deficiencias en la gestión y control de bienes decomisados
- Objetivos presupuestarios y de gestión no cumplidos
- Diez recomendaciones para mejorar la gestión
El Tribunal de Cuentas advierte que la falta de recursos humanos obstaculiza la vigilancia efectiva de bienes confiscados a organizaciones delictivas
En un informe especial, el Tribunal de Cuentas ha emitido una advertencia sobre la grave situación que enfrenta el Estado en cuanto a la vigilancia y control de los bienes confiscados a organizaciones delictivas. Según el organismo, la falta de recursos humanos es uno de los principales obstáculos para llevar a cabo una vigilancia efectiva de estos activos, lo que puede propiciar la reincorporación de los bienes al mercado y, en última instancia, el fortalecimiento de las organizaciones criminales. Esta situación es especialmente preocupante, ya que los bienes confiscados son una herramienta clave en la lucha contra el crimen organizado y la corrupción.
Falta de recursos humanos obstaculiza la vigilancia de bienes confiscados a organizaciones delictivas, advierte el Tribunal de Cuentas
El Tribunal de Cuentas ha emitido una advertencia sobre la carencia de personal suficiente para controlar y gestionar los bienes decomisados al narcotráfico y otros delitos relacionados. Según la presidenta del Tribunal de Cuentas, Enriqueta Chicano Jávega, no existen personas encargadas del control directo de estos bienes, lo que dificulta su análisis y gestión eficiente.
Deficiencias en la gestión y control de bienes decomisados
El informe del Tribunal de Cuentas destaca que la falta de personal se traduce en una deficiente gestión y control de los bienes decomisados, especialmente en lo que se refiere al almacenaje. Además, no existe una adecuada trazabilidad de los expedientes y su contenido una vez que los bienes han sido tasados, lo que dificulta la identificación y localización.
El Tribunal de Cuentas también critica la financiación del Plan Nacional sobre Drogas, que depende en su mayor parte de los ingresos generados por el Fondo de bienes decomisados. En 2022, estos ingresos superaron el 276,86% de sus créditos iniciales, con relevantes retrasos en su tramitación.
Objetivos presupuestarios y de gestión no cumplidos
El análisis del Tribunal de Cuentas revela que los objetivos presupuestarios y de gestión definidos por la Delegación Nacional para el Plan sobre Drogas no se han cumplido. En lugar de eso, se ha producido una mera cumplimentación de datos estadísticos que no permiten evaluar el grado de cumplimiento de los objetivos ni el impacto de las acciones emprendidas.
Además, el Tribunal advierte que la gestión de los bienes decomisados no sigue el procedimiento establecido en el Reglamento del Fondo, sino un procedimiento propio no regulado normativamente.
Diez recomendaciones para mejorar la gestión
En vista de estas deficiencias, el Tribunal de Cuentas ha emitido diez recomendaciones dirigidas a la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas. Estas recomendaciones buscan mejorar la gestión y control de los bienes decomisados, así como la eficiencia en la enajenación de estos bienes.
El informe del Tribunal de Cuentas se publica en una semana en la que el Ministerio del Interior ha informado de la destrucción de más de 3.300 toneladas de drogas en los últimos cinco años, gracias a la colaboración del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO), las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y las autoridades judiciales.
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