Ralf Neidenthal destaca la importancia de la música en la vida de personas con discapacidad: 'Es un sostén para su salud mental y emocional'

Ralf Neidenthal destaca la importancia de la música en la vida de personas con discapacidad: 'Es un sostén para su salud mental y emocional'

En un reciente encuentro, Ralf Neidenthal, destacado experto en el campo de la discapacidad, hizo hincapié en la importancia de la música en la vida de las personas con discapacidad. Según Neidenthal, la música es un sostén fundamental para la salud mental y emocional de estas personas, ya que les brinda un sentido de libertad y autonomía, permitiéndoles expresar sus emociones y sentimientos de manera efectiva. Además, la música puede ser un instrumento terapéutico para aquellos que enfrentan desafíos en su desarrollo y crecimiento. A continuación, profundizaremos en la importancia de la música en la vida de las personas con discapacidad y exploraremos cómo puede ser utilizada como herramienta para mejorar su calidad de vida.

La música como herramienta de inclusión: Ralf Neidenthal destaca su poder para mejorar la salud mental y emocional de personas con discapacidad

Ralf Neidenthal, creador y director de la ONG Todos Hacemos Música, ha dedicado su vida a demostrar que la música es una herramienta poderosa para mejorar la salud mental y emocional de personas con discapacidad.

Desde muy joven, Ralf sintió la pasión por la música y su deseo de ayudar a los demás. Después de descubrir la musicoterapia, supo que ése sería el camino que seguiría. Veía mucho potencial, salían cosas muy lindas, cuenta sobre sus experiencias en terapia con personas con y sin discapacidad.

La música es un catalizador que los lleva a lugares impensados. Ralf organizó conciertos de fin de año donde cada persona hacía algo: cantar, bailar, tocar un instrumento, etc. A las personas con discapacidad las mezclaba con personas que no tenían discapacidad, que esto es la inclusión de verdad, explica.

El nacimiento de Todos Hacemos Música

En 2007, Ralf vio los vídeos de la iniciativa Playing for Change, donde participan músicos de todo el mundo con artistas famosos. Quiero hacer lo mismo pero con las personas con discapacidad, que es una población muy olvidada, y artistas conocidos de la Argentina, se dijo.

Después de que algunos de los vídeos que grabaron se viralizaron, Ralf se planteó dar forma y orden a lo que ya estaba haciendo. Así nació la ONG Todos Hacemos Música en 2017, con el objetivo de ofrecer experiencias musicales gratuitas y la posibilidad de disfrutar de la música.

La inclusión a través de la música

En Todos Hacemos Música, las personas con discapacidad participan en distintas experiencias musicales. No ponemos límites y si vemos que hay una complicación buscamos la forma. Trabajamos con adaptaciones. Por ejemplo, moviendo un solo dedo podés hacer música, defiende Ralf.

La organización cuenta con voluntarios y beneficiarios. Los beneficiarios son siempre personas con discapacidad de cualquier tipo: ciegos, autistas, con parálisis cerebral, con síndrome de Down, etc. También hay variedad de edades.

Organizan encuentros en plazas y parques para hacer música y socializar con todo aquel que quiera acercarse. También tienen dos bandas inclusivas de pop rock con quienes dan conciertos. Tienen un proyecto infantil, THM Kids, para niños y niñas con discapacidad.

Un sueño de inclusión a nivel mundial

Ralf sueña con que la inclusión de personas con discapacidad a través de las distintas actividades musicales que propone la organización se contagie a todo su país y a todo el mundo.

La ONG ya ha salido de Buenos Aires y ha hecho una gira musical por toda Argentina. Pasaron por las veintitrés provincias y en cada una de ellas organizaron en sitios emblemáticos actuaciones musicales de personas con discapacidad de cada lugar.

Actualmente, están preparando un documental y un libro que resume lo que hacen. Me gusta porque es una metáfora buenísima. La discapacidad sigue estando pero en un segundo lugar y la música la sostiene, explica entusiasmado sobre la portada del libro.

Ralf es consciente de que hay un camino por recorrer para superar la mediocridad y mostrar el potencial de las personas con discapacidad. Te vienen padres que te dicen che, nunca me imaginé a mi hijo en un escenario. Y eso es resano. Hay esperanza, hay potencial, la música es un catalizador que los lleva a lugares impensados, concluye.

Para Ralf, la música es una herramienta muy poderosa para mejorar la salud mental y emocional de las personas con discapacidad. Discapacidad no quiere decir discapacitante, defiende. Yo siento que es una herramienta muy poderosa la música.