En un impactante y emocionalmente intenso giro de eventos, se ha revelado que la hija del legendario Elvis Presley, Lisa Marie Presley, veló el cuerpo de su hijo durante dos meses antes de darle sepultura. Esta información, sin embargo, debe ser tomada con cautela, ya que las fuentes cercanas al caso han proporcionado versiones contradictorias y no se ha obtenido una confirmación oficial. Es fundamental ser responsable al compartir esta noticia y esperar a que se clarifiquen los detalles.
La dolorosa decisión de Lisa Marie Presley: mantener el cuerpo de su hijo en casa durante dos meses
Riley Keough, hija de Lisa Marie Presley, promociona en estos momentos su autobiografía Desde aquí a lo desconocido: Memorias, en la que revela un secreto que su madre guardó durante dos meses después de la muerte de su hijo Benjamin Keough en 2020. Según el libro, Lisa Marie Presley se encontraba tan desconsolada por la pérdida de su hijo que decidió mantener su cuerpo en su casa durante dos meses antes de darle sepultura en Graceland, junto a su abuelo y, más tarde, de su propia madre.
En el libro, Lisa Marie revela que ella misma había estado luchando por mantenerse con vida debido a sus adicciones y tentativas de suicidio, para poder ver crecer a sus hijos, especialmente a las mellizas Harper y Finley Lockwood, que ahora tienen 16 años. Fue por cuidar de ellas que no pudo despedirse de Benjamin como quería.
Fue por ello que, mientras se decidía a enterrar el cadáver de su hijo en Graceland o en Hawái, lo mantuvo en la casa de huéspedes de su mansión en Calabasas, en California, aprovechando que ese estado no tiene ninguna ley que exija un entierro inmediato. Además, explica que tuvo una enorme suerte al encontrar al dueño de una funeraria que se apiadó de ella y que le llevó el cadáver de Benjamin a su casa, consiguiendo que su cuerpo sin vida estuviese a 55 grados Fahrenheit (12,7 grados centígrados) para que no se descompusiese.
Lisa Marie explica en el libro que era consciente de lo extraño e inaudito de la situación, pero que a ella le sirvió para aceptar el fallecimiento y pasar el duelo. Creo que a cualquier otra persona le daría un susto de muerte tener allí a su hijo así, de esa manera. Pero a mí no, escribe.
Por último, hay un detalle más sobre aquella muerte: Lisa Marie y Riley honraron a su querido Benjamin haciéndose tatuajes iguales.
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