Títulos y reflexiones sobre Eurotrash, la nueva novela de Christian Kracht (Vegueta Ediciones, 2024)

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Títulos y reflexiones sobre Eurotrash, la nueva novela de Christian Kracht (Vegueta Ediciones, 2024)

En el panorama literario actual, Christian Kracht, escritor suizo de renombre, se prepara para lanzar su nueva novela, Eurotrash, bajo el sello de Vegueta Ediciones en el año 2024. Esta obra, que promete generar un gran impacto en la escena cultural, nos invita a reflexionar sobre la identidad europea y la decadencia de los valores en la sociedad contemporánea. A través de una trama compleja y llena de ironía, Kracht nos lleva a un viaje introspectivo sobre el estado de la Unión Europea y su papel en el mundo globalizado. En este artículo, exploraremos los títulos y reflexiones que rodean esta obra maestra, que sin duda será un tema de conversación en los próximos meses.

Un viaje a través de la Suiza oscura y la memoria del nazismo

Un viaje a través de la Suiza oscura y la memoria del nazismo

Leer y volver a leer. Intentar encontrar algo distinto, impactante, lúdico… buscar en el catálogo nutritivo de Vegueta Ediciones, encontrar Eurotrash de Christian Kracht traducido por Isabel García Adánez, esperar unos meses, no estar muy seguro de si te va a gustar, si Suiza, el nazismo y el humor van a ser un triángulo narrativo viable. Empezar, seguir, responder: sí.

Eurotrash es uno de los libros más importantes de la última literatura alemana. La portada, con el rojo sangre de la Confederación Helvética y la bandera alemana, la esvástica, la cruz, negro y blanco, asusta, repele… impacta. Y, después, la soledad del protagonista, las pastillas de su madre, el vodka, recorrer Suiza. Reírse, sí reírse. No se lo creerán ustedes, acostumbrados a gasolineras, moteles y caminos polvorientos, aquí no hay Jack Kerouac ni Neal Cassidy, aquí está la madre y el hijo, los francos suizos, los euros y la manera aséptica de vivir en el centro neutral, económico y tóxico de Europa.

Suiza, más allá del chocolate, los relojes y las cuentas opacas. Más allá del desprecio ario, de las murallas invisibles, Christian Kracht se defiende, fuma, se lamenta, cambia la bolsa que su madre utiliza para hacer sus necesidades, recuerda sus años en colegios de lujo, internados y soledad, recuerda, también, las nocivas ramificaciones de su familia en el entramado de terror y corrupción del nazismo.

Mezclar Perfidia de Nat King Cole, sus tíos con lienzos de valor incalculable (no es una metáfora, hablamos de Pieter Brueghel) junto a estampas sadomasoquistas (tampoco lo es esto). De Berlín el Der Spiegel, de Zúrich jerséis de estampados macrobióticos, del Tíbet, las SS en busca de la lanza de Longino. Europa, la buena, la fetén, pivotando alrededor de Suiza, cines, abrigos de pieles, ansiolíticos, barbitúricos, una madre que representa, permítanme la repetición, ‘la vieja Europa’, y es con ella con la que el protagonista inicia una saga/fuga hacia la nada, hacia el olvido.

Comida suiza, comida con aditivos de Nestle, cercanos a las turbias proteínas de Soylent Green (‘Hasta que el destino nos alcance’), como el sushi de un país sin salida al océano. Fenobarbitales+amor filial fallido, friegas, hoteles, la enfermedad de cristal: «Mi madre dio un suspiro de alivio, respiraba con dificultad y olía a vodka, y eso que el vodka no huele a nada».

Mezclar la RFA con la RDA, extrañar a David Bowie más que a su propio padre. Los dientes de Bowie. Bowie viviendo en Suiza. Así que nos podemos acercar a la novela, que tiene algo de pop, claro. Suiza hecha con legos. Recordar que el último disco de Bowie se llamó Lázarus. Cómo nos engañó a todos. Europa ha muerto. Lo que vemos es un zombi. Malo. De los italianos.

Una novela de humor ambientada en Suiza, una novela de carreteras pasando por todos los cantones, una novela en la que buscan la tumba de Jorge Luis Borges, claro. La traducción de Funes el memorioso fue La memoria implacable. Pensar en Hergé, en el Asunto Tornasol de Tintín (y yo, claro, en Asterix en Helvecia, con esa portada con los dos protagonistas encerrados en una primitiva caja de seguridad).

Ginebra, hacia donde conducía Nick Cave en su Higgs Boson Blues y los X-Men (la Patrulla-x) pasando sus últimos poderes a la madre. Madre e hijo, una risa amarga, una tristeza agridulce. La madre que agarra la mano de su hijo, con la gran noche cerca, África como un sueño. Cuando todo termina, porque todo termina, aunque esté destinado a durar mil años, ni el dinero ni el poder pueden hacer nada. Lo importante, de verdad, es no estar solo. Y este libro, esta historia, te acompaña.

Luisa Herrera

Hola, soy Luisa, periodista de la página web El Noticiero, un periódico independiente de actualidad nacional e internacional. Mi pasión es descubrir las últimas novedades y presentarlas con la más rigurosa objetividad a nuestros lectores. Con mi pluma, busco informar, analizar y contextualizar la información para que todos puedan estar al tanto de lo que sucede en el mundo. Mi compromiso es con la verdad y la imparcialidad, para ofrecer un periodismo de calidad que contribuya al debate y la reflexión. ¡Gracias por seguirnos en nuestras noticias!

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