Las 5 especies animales que no recomienda tener como mascota, según un experto veterinario
La elección de una mascota adecuada es fundamental para garantizar el bienestar tanto del animal como del propietario. Sin embargo, existen especies que no son recomendadas como mascotas debido a sus necesidades específicas y complejas. Un experto veterinario ha revelado las 5 especies animales que no deberían ser consideradas como opciones para tener en casa. Estas especies, aunque pueden parecer atractivas y fascinantes, requieren de cuidados y condiciones específicas que pueden resultar complicadas de proporcionar en un entorno doméstico. A continuación, descubrirás qué especies son las que no deberían ser domesticadas y por qué.
Especies animales que no recomienda tener como mascota, según un experto veterinario
La mayoría de animales domésticos pertenecen a cuatro grandes especies (perros, gatos, aves o peces), pero hay muchos otros tipos de mascotas. No obstante, no todas tienen la misma idoneidad.
Ben the Vet, un popular veterinario británico conocido por su canal de TikTok, donde ofrece consejos y revela detalles sobre su profesión, cuenta qué cinco especies animales él no tendrá nunca como mascota.
Loros
En primer lugar, en su lista están los loros, y da una razón que muchos probablemente ni siquiera conocen. Tener un loro significa no volver a tener una cacerola antiadherente nunca más. No es broma, cuando se calienta, el revestimiento libera un gas que puede ser fatal para los loros, explicó.
El veterinario agregó que, si bien los loros pueden considerarse mascotas muy gratificantes, puede ser extremadamente difícil proporcionarles a las aves la cantidad adecuada de espacio y estimulación, ya que generalmente viven en estado salvaje.
Ratones
A continuación están los ratones, ya que Ben the Vet dice que solo viven alrededor de uno o dos años, lo que puede ser difícil para un dueño que se encariñe con el animalito. He tenido muchos conejillos de indias a lo largo de los años y te encariñas mucho con ellos. Es bastante difícil decir adiós después de cuatro o cinco años, pero para mí, un año, como lapso de tiempo para desarrollar un vínculo con una mascota y luego tener que decirle adiós, es demasiado poco, sostiene.
Conejos
Tal vez la entrada más sorprendente de la lista, al ser una mascota popular, sea el conejo. A pesar de lo que la gente pueda pensar, Ben dijo que no viven bien en un hogar con niños. Contrariamente a lo que mucha gente supone, los conejos realmente no son buenas mascotas para los niños. Son una especie de presa, por lo que son naturalmente muy tímidos, explicó.
No siempre les gusta que los sostengan en brazos y son muy frágiles. Patean y se caen de los brazos desde una gran altura al suelo. No es raro que se rompan los huesos de las extremidades e incluso la columna vertebral, añade.
Además de esto, necesitan una dieta estricta y una limpieza regular, y también son susceptibles a problemas de salud, lo que genera facturas veterinarias potencialmente costosas. Pueden ser excelentes mascotas si inviertes tiempo en ellos, pero demasiadas personas los meten en la jaula y se olvidan de ellos, agregó.
Monos
El veterinario habla de la vez que fue voluntario en una organización benéfica de vida salvaje en Ecuador. Allí vio a muchos monos bebés cuyas madres habían sido asesinadas para poder secuestrarlas y venderlas como mascotas a personas que sólo quieren un mono porque son adorables. Calificó estas acciones de bastante enfermizas.
Un mono es un animal salvaje extremadamente inteligente, no una especie domesticada como los gatos o los perros, añadió el veterinario. Tener un mono como mascota es extremadamente difícil debido a sus complejas necesidades en el hogar. Termina diciendo simplemente: No lo hagáis.
Hurones
El último en la lista es el inquieto hurón: Son mascotas descaradas, divertidas y entretenidas, pero es un gusto adquirido. Realmente huelen mal y tienen mordeduras desagradables si se te pegan en la mano.
Los hurones son extremadamente inteligentes (de hecho, tan listos como los perros y los gatos) y, al igual que los loros, también requieren mucha interacción y espacio físico. Sin embargo, Ben advierte de que, en última instancia, los hurones no son para todos.
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