¿Cableado o sin cables? La elección ideal para tu termostato antes de que llegue el invierno

¿Cableado o sin cables? La elección ideal para tu termostato antes de que llegue el invierno

Con el invierno a la vuelta de la esquina, es fundamental asegurarse de que nuestro sistema de calefacción esté en perfecto estado para enfrentar los días más fríos del año. Uno de los aspectos más importantes a considerar a la hora de elegir un termostato es la conexión, ya sea mediante cableado o sin cables. Ambas opciones tienen sus ventajas y desventajas, y es importante analizarlas detalladamente para tomar la elección ideal para nuestras necesidades específicas. En este artículo, exploraremos las características clave de cada opción y ofreceremos consejos prácticos para ayudarte a tomar la decisión correcta y disfrutar de un invierno cálido y acogedor.

La elección perfecta para tu hogar: Cableado o sin cables para tu termostato

Los termostatos son sistemas de control que se utilizan para arrancar y detener un equipo de calefacción en función de la temperatura elegida, por lo que se usan para controlar calderas, sistemas de producción a.c.s., bombas de calor, aire acondicionado…, contribuyendo a poder mantener una temperatura ambiente apropiada dentro de los rangos definidos previamente por el usuario en los hogares en España.

Actualmente, podemos encontrar en el mercado diferentes tipos de termostatos, cada uno con sus propias características. Uno de ellos es el termostato analógico, que es el más tradicional, estando equipado con una rueda y que, al girar, permite elegir la temperatura deseada para el hogar, aunque ofrece poca precisión y es poco eficiente.

Más eficiente es el termostato digital, que funciona de forma similar al anterior, pero que cuenta con una pantalla a través de la cual se fija la temperatura, pero tampoco se puede programar. En ambos casos con modelos con hilos o cable.

Más preciso que los anteriores es el cronotermostato, que se puede programar para controlar el encendido y apagado de la calefacción y su temperatura por horas y días, además de haber modelos inteligentes que disponen de conexión Wifi para su control a través de una aplicación móvil.

A estos hay que sumar el termostato inalámbrico, que a diferencia de los anteriores no usa cables para conectarse con la caldera, y lo que hace es enviar la señal de encendido y apagado mediante radiofrecuencia. Su gran ventaja es que se puede llevar a cualquier lugar de la casa con comodidad y que en los casos con conexión Wifi se pueden controlar desde el smartphone con comodidad.

Además, también se comercializan los termostatos modulantes, que además de encender y apagar la caldera, son capaces de equilibrar la temperatura interior en función de la exterior, que captan a través de una sonda. Es imprescindible en las calderas de condensación y consigue el máximo ahorro energético. Los termostatos y cronotermostatos modulantes pueden ser inalámbricos o con hilos, y pueden tener conexión Wifi.

¿Cuál es la mejor opción?

Teniendo en cuenta que los termostatos de hilo necesitan de una conexión a la caldera por cable y que los inalámbricos transmiten la señal por radiofrecuencia, una gran diferencia entre ellos radica en la comodidad y flexibilidad, en lo que salen ganando estos últimos, pues al no necesitar de cables, se pueden colocar en cualquier lugar del hogar. Además, es una opción ideal para no tener que hacer obras para poner cableado.

A ello hay que sumar otras ventajas del termostato inalámbrico, que es la mejor opción, pues es un sistema mucho más eficiente que el de hilos, situándose su ahorro energético en un 15-20% superior, al permitir encender y apagar la caldera de forma automática e incluso hacer ajustes a medida si se trata de un modelo conectado a internet a través de la red Wifi, con control a través de una app desde el smartphone.