Consigue un ahorro energético con las válvulas termostáticas en tu hogar en España

Consigue un ahorro energético con las válvulas termostáticas en tu hogar en España

En la actualidad, la eficiencia energética es un tema de gran relevancia en España, ya que el consumo de energía en los hogares es uno de los principales causantes del gasto energético en el país. Por este motivo, es fundamental encontrar soluciones que permitan reducir el consumo de energía y, por lo tanto, ahorrar dinero en la factura de la luz. En este sentido, las válvulas termostáticas se presentan como una excelente opción para lograr un ahorro energético significativo en el hogar. Estas válvulas permiten regular la temperatura de cada habitación de manera individual, lo que supone un ahorro considerable en comparación con los sistemas de calefacción tradicionales.

Regula la temperatura con precisión: ¡descubre las ventajas de las válvulas termostáticas en tu hogar!

Las válvulas termostáticas son unos componentes que se colocan en los radiadores para regular de una manera automática y precisa la temperatura de las diferentes estancias de la vivienda, teniendo como función la de regular el caudal de agua que circula por el radiador, permitiendo así un notable ahorro de energía.

Instalación y funcionamiento sencillo

La instalación y funcionamiento de las válvulas termostáticas es muy sencillo. En primer lugar, hay que apagar la calefacción para vaciar todo el circuito purgando los radiadores. A continuación, habrá que colocar la válvula en uno de los laterales del radiador y colocar el cabezal termostático, asegurándose en todo caso de que la válvula elegida es compatible con el radiador.

Una vez instalada, habrá que elegir la temperatura deseada girando la válvula, encargándose de abrir el radiador para que pase el agua y se genere calor si la temperatura seleccionada es mayor de la que hay en la habitación, mientras que, si la temperatura elegida es inferior, se cerrará el paso de agua y el radiador deja de emitir energía.

Tipo de válvulas termostáticas

Dentro de las válvulas termostáticas podemos encontrar diferentes tipos de ellas:

• Válvulas con cabezal mecánico, que disponen de una rueda giratoria con números del 1 al 5 con los que se controla la temperatura a obtener en la estancia en la que se encuentran;
• Válvulas con cabezal electrónico, con un panel de control formado por pantalla y teclado para regular la temperatura y con la posibilidad de programar horarios y temperaturas de todas las estancias de la vivienda;
• Válvulas con cabezal electrónico a distancia, que funciona de una manera similar a la anterior, pero que permite ajustar la temperatura a distancia o desde una aplicación en el teléfono móvil, todo ello a través de un crono termostato centralizado que se puede encontrar situado en cualquier punto de la vivienda.

Ventajas y recomendaciones de uso

Las válvulas termostáticas permiten disfrutar de un notable ahorro de energía y mayor bienestar en el hogar, con la posibilidad de controlar la temperatura incluso en habitaciones vacías que, en otro caso, podrían estar malgastando energía. Además, se adaptan de forma automática a los cambios de la habitación.

Más allá de tener una larga vida útil y requerir de poco mantenimiento, ofrecen una gran eficiencia energética de la instalación y son respetuosas con el medioambiente. Sus precios oscilan entre los 15 y los 70 euros, y se amortizan a corto-medio plazo.

Para ahorrar con ellas hay que poner en práctica unas recomendaciones de uso básicas:

• Cuando se va a estar un período largo de tiempo ausente de la vivienda durante el invierno, conviene ajustar la válvula en la posición anti-hielo;
• Si ocurre lo mismo durante el verano, con el sistema desactivado, habrá que ajustar la válvula al número más alto;
• En el caso de que vayas a abrir las ventanas de la vivienda para ventilar, conviene cerrar la válvula termostática con anterioridad para evitar que se derroche calor;
• No cubrir el cabezal termostático para que funcione de una forma correcta.