No hay lugar para la intimidación política: El presidente del Gobierno acusa a los responsables de la FAES de utilizar la descalificación como arma po

No hay lugar para la intimidación política: El presidente del Gobierno acusa a los responsables de la FAES de utilizar la descalificación como arma política y recordó que la democracia se basa en el diálogo y la tolerancia

En una fuerte declaración, el presidente del Gobierno ha lanzado un contundente mensaje contra la intimidación política, acusando a los responsables de la FAES de utilizar la descalificación como arma política. Según el jefe del Ejecutivo, esta práctica es incompatible con los principios democráticos, que se fundamentan en el diálogo y la tolerancia. El presidente ha recordado que la democracia se basa en el respeto a las opiniones ajenas y en la búsqueda de consensos, y no en la imposición de ideas mediante la intimidación y la descalificación. Esta declaración ha generado un gran revuelo en el ámbito político y ha sido objeto de debate en los medios de comunicación.

El presidente del Gobierno denuncia el uso de ataques personales y calumnias por parte de FAES

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha lanzado una dura crítica contra la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES), presidida por el expresidente del Gobierno José María Aznar, tras una serie de acusaciones y ataques personales lanzados contra él y su familia.

La fundación ha tachado al Gobierno de difamador y ha acusado al jefe del Ejecutivo de ser un 'killer' político sin escrúpulos. Además, ha cuestionado la formación académica de su mujer, Begoña Gómez, a quien ha descrito como carente de habilitación académica alguna mínimamente relevante y ha insinuado que se ha beneficiado de su condición de mujer de para montar una cátedra.

Ataques personales y difamación

FAES ha lanzado una serie de acusaciones contra el Gobierno, a quien considera una fuente incesante y agravada de difusión de bulos para intentar contrarrestar las acusaciones de corrupción. La fundación también le atribuye un deslizamiento caudillista y autoritario al Ejecutivo.

Entre las acusaciones, se encuentra la de que el Gobierno ha lanzado una campaña de difamación contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, a quien ministros como Bolaños, López y el propio Sánchez han calumniado insultándola como corrupta, al hermano de esta y a la propia pareja de Ayuso.

Uso del término 'lawfare' como arma

FAES también denuncia el uso del término 'lawfare' como arma política y el ataque a los jueces, a quienes se busca entregar a una suerte de linchamiento. La fundación confía en que las calumnias y falsedades tengan respuesta penal para que el Gobierno no arrastre a la democracia al lodazal en el que se revuelve.

Además, la organización apunta que Sánchez no es un pobre inocente asediado por los jueces y piden al presidente que tenga límites. Cuando la mentira se convierte en abierta calumnia o en falsedad patente, quienes las promuevan y las propaguen deberían avistar la respuesta penal que merecen, culmina.

El presidente del Gobierno ha respondido a estas acusaciones, denunciando el uso de la descalificación como arma política y exigiendo que se ponga fin a la intimidación política. No hay lugar para la intimidación política, ha sentenciado.

La respuesta del presidente del Gobierno

El presidente del Gobierno ha reiterado que no permitirá que se utilicen ataques personales y calumnias para distraer la atención de los problemas reales del país. No vamos a permitir que se utilicen estas tácticas para desviar la atención de la opinión pública, ha afirmado.

En lugar de eso, ha llamado a la oposición a trabajar juntos para abordar los desafíos que enfrenta el país. Es hora de trabajar juntos para encontrar soluciones a los problemas de los españoles, ha concluido.