En un hecho sin precedentes en el fútbol español, el partido entre el Deportivo Alavés y el Getafe fue interrumpido durante varios minutos en el estadio Mendizorroza de Vitoria. El motivo fue la grave falta de respeto mostrada por un espectador hacia el delantero del Manchester United, Mason Greenwood, quien se encontraba en el banquillo. El jugador inglés fue objeto de insultos racistas por parte de un aficionado, lo que generó una gran conmoción en el estadio y entre los jugadores de ambos equipos. Ante esta situación, los árbitros decidieron suspender temporalmente el encuentro hasta que se tomaran medidas para restablecer el orden y la tranquilidad en el estadio.
Partido detenido por insultos racistas dirigidos a Mason Greenwood en Alavés-Getafe
El futbolista del Getafe, Mason Greenwood, fue víctima de insultos racistas procedentes de un grupo de aficionados de la Real Sociedad desplazados al Coliseum Alfonso Pérez, lo que obligó al colegiado del encuentro, Jorge Figueroa Vázquez, a detener el partido entre el Alavés y el Getafe en el estadio de Mendizorroza.
El incidente ocurrió cuando el árbitro detectó los insultos ofensivos y racistas procedentes de la grada, por lo que no dudó en detener el encuentro para, a continuación, avisar al delegado del equipo local, Lluis Codina, para que señalase el incidente por los altavoces y videomarcador del estadio.
Gracias a la intervención del colegiado, el incidente no escaló y el partido quedó detenido durante dos minutos antes de que el árbitro indicase la reanudación. Una vez resuelto el incidente, el choque liderado por el combinado local (1-0) al descanso, pudo continuar su curso.
Este lamentable incidente es un recordatorio de que el racismo sigue siendo un problema en el fútbol y que es necesario tomar medidas para erradicarlo. Es importante que todos los involucrados en el fútbol, desde los jugadores hasta los aficionados, trabajen juntos para crear un entorno más inclusivo y respetuoso.
Esperamos que este incidente no se repita en el futuro y que el fútbol pueda seguir siendo un deporte que une a la gente, en lugar de dividirla.
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