Al subir al avión, es común recibir un cálido saludo por parte de las azafatas. Sin embargo, ¿algunos se han preguntado por qué estas profesionales del servicio a bordo se esfuerzan por dar la bienvenida a los pasajeros? La respuesta puede sorprender a más de uno. Lejos de ser una simple cortesía, el saludo de las azafatas tiene un propósito muy específico que va más allá de la mera amabilidad. En este artículo, descubriremos la sorprendente razón detrás de este gesto aparentemente inocente y cómo puede afectar la seguridad de todos a bordo.
La verdad detrás del saludo: ¿Por qué las azafatas te saludan al subir al avión?
Cuando subimos a un avión, el primer rostro que nos recibe es el de un miembro de la tripulación de cabina. La azafata o azafato nos saluda con una sonrisa y un gesto de cortesía, pero detrás de ese saludo hay una explicación más profunda.
En redes sociales, varias azafatas han revelado el verdadero motivo detrás de ese saludo. Según Kat Kamalani, azafata y usuaria de TikTok, cuando entras en un avión y ves a una cara sonriente y feliz, en realidad te estamos mirando de arriba abajo para tratar de averiguar a un perfil concreto de persona que vaya a ayudarnos ante una emergencia.
¿Qué buscan las azafatas?
Entre los perfiles que buscan detectar se encuentran pilotos, bomberos, policías, militares, médicos y enfermeros, que puedan colaborar en el caso de una emergencia médica o si existe una brecha de seguridad. Además, también buscan detectar posibles casos de tráfico de personas, algo que suele ocurrir con bastante frecuencia.
Además de crear una atmósfera acogedora o de garantizar la seguridad de los viajeros, esos saludos amistosos esconden mucho más de lo que parece a primera vista. La azafata no solo te saluda por educación, sino que también se asegura de que no has bebido demasiado o te sientes demasiado mal para volar, y trata de hacerse una idea de con quién pueden contar como ayuda en caso de emergencia.
La evaluación del estado de ánimo de los pasajeros
Mientras la azafata saluda y observa a los viajeros, también evalúa el estado de ánimo de los pasajeros y trata de anticiparse a cualquier problema potencial. Desde viajeros nerviosos hasta viajeros experimentados, un cálido saludo puede ser de gran ayuda para que todos se sientan a gusto en la cabina, explican.
Así que la próxima vez que subas a un avión y la azafata te salude, recuerda que detrás de esa sonrisa hay una razón más profunda. ¡Es más que solo una cortesía!
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