En un importante paso adelante para la salud pública, el medicamento Champix, conocido por ser una herramienta efectiva para ayudar a las personas a dejar de fumar, vuelve a estar disponible en el mercado gracias a una financiación gubernamental que garantiza su acceso a aquellos que lo necesitan. Esta noticia es un alivio para muchos que habían visto interrumpida su lucha contra el tabaquismo debido a la escasez del medicamento. La vuelta de Champix al mercado es un triunfo para la sanidad y un reconocimiento al esfuerzo del gobierno por proteger la salud de los ciudadanos.
Sanidad pública vuelve a financiar el Champix, el tratamiento para dejar de fumar
Dejar de fumar es una decisión cargada de beneficios. Desde este mes de junio, la sanidad pública española ha anunciado que volverá a financiar el tratamiento con vareniclina, principal principio activo del famoso Champix de Pfizer, para ayudar a los fumadores a abandonar el hábito.
Champix, el tratamiento clásico para dejar de fumar
La vareniclina, comercializada como Champix por Pfizer, es uno de los primeros y más exitosos tratamientos en el mercado para dejar el tabaco. Se trata de un agonista parcial del receptor nicotínico de acetilcolina α4β2 que funciona de un modo similar a un ansiolítico.
En esencia, lo que hace este compuesto es reducir el efecto de la nicotina en el cerebro y reducir la ansiedad que provoca el síndrome de abstinencia típico que sufren los fumadores al tratar de abandonar el hábito.
Beneficios y efectos secundarios
Como todo tratamiento, el Champix puede provocar algunos efectos secundarios, como náuseas, dolor de cabeza, vómitos, flatulencias, insomnio, sueños anormales, disgeusia o pérdida del sentido del gusto, trastornos psiquiátricos e ideación suicida.
Es especialmente importante tener en cuenta los efectos secundarios neuropsiquiátricos, como cambios de humor, irritabilidad, somnolencia, pérdida de coordinación, alucinaciones, reacciones paranoides, depresión y conductas suicidas.
En España, la vareniclina no está sujeta a receta médica, pero se aconseja encarecidamente consultar con un especialista, especialmente cuando se padecen enfermedades psicológicas previas o enfermedades crónicas.
La retirada del mercado
El motivo de la retirada del mercado del Champix fue la detección de nitrosaminas, un compuesto considerado cancerígeno.
Las nitrosaminas son un subproducto relativamente frecuente en la fabricación de ciertas clases de medicamentos, debido a las reacciones químicas que tienen lugar durante la producción.
Los organismos reguladores imponen estrictos controles a los productos farmacéuticos, hasta el punto en el que la detección de impurezas de nitrosaminas por encima de los niveles considerados aceptables puede ser motivo de la retirada del mercado del fármaco.
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