En pleno verano, la temperatura en Madrid se ha convertido en un tema de gran importancia para los residentes de la ciudad. Ante la ola de calor que azota la región, las residencias de la ciudad están tomando medidas para garantizar el bienestar de sus residentes. Entre las iniciativas destacan la implementación de menús de verano ligeros y frescos, diseñados para combatir el calor, así como mejoras en la climatización de las instalaciones. Estas acciones buscan proporcionar un entorno más cómodo y seguro para los residentes, especialmente los de edad avanzada, que son más vulnerables a los efectos del calor extremo.
Comunidad de Madrid prepara a residencias para enfrentar olas de calor
La consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales, Ana Dávila, visitó una residencia de mayores en Vallecas para supervisar las medidas de prevención contra las olas de calor en las residencias públicas de la Comunidad de Madrid.
Entre los meses de junio y agosto, los centros sociosanitarios de la región adoptan medidas específicas para prevenir que las personas más vulnerables puedan sufrir problemas de salud por las altas temperaturas. Vigilancia, hidratación y refrescar el ambiente son tres de los puntos principales que se aplican en las residencias públicas de la Comunidad de Madrid.
Plan de actuación frente al calor
El Plan de actuación frente al calor en las residencias de la Agencia Madrileña de Atención Social busca que todas las personas estén protegidas frente a las olas de calor de verano. La consejera Ana Dávila destacó que todos los centros públicos de la región, tanto de gestión directa como indirecta, cuentan con equipos de climatización, ya sean aparatos fijos, portátiles o ventiladores.
Este año, desde la Consejería han trabajado para mejorar los aparatos y que estén en buenas condiciones durante los meses de verano. Así, por ejemplo, en la residencia para personas mayores Vallecas se ha destinado una partida de 420.000 euros en nuevos sistemas para refrescar las zonas comunes.
Inversión para mejorar la climatización
Para implementar estas medidas y adaptar estos espacios, la Comunidad de Madrid ha previsto una inversión de 16,6 millones de euros.
Prevención y vigilancia
En los centros sociosanitarios se dispone del boletín diario sobre olas de calor de la Dirección General de Salud Pública, que ofrece información sobre las temperaturas máximas a lo largo de la jornada y la previsión de los días siguientes. Con estos datos, cada unidad va adoptando sus planes de prevención.
Los trabajadores hacen seguimiento de las personas más vulnerables, con alguna afección o patología crónica, para asegurarse que su estado de salud no se ve alterado por las altas temperaturas. Durante el turno de noche se vigila cualquier síntoma de malestar, como debilidad, mareos o alteración de la respiración.
Importancia de la hidratación
Para prevenir casos de deshidratación, las residencias inciden en la importancia de aumentar el consumo de líquidos. Para esta época del año, los menús de alimentación se adaptan para incluir más frutas, verduras, ensaladas o gazpachos, alimentos que contienen un alto volumen de agua y minerales.
Junto a todas estas medidas, en los espacios comunes se coloca cartelería informando sobre hábitos y recomendaciones, como evitar salir a la calle durante las horas de más incidencia solar.
Deja una respuesta