Tecnología al alcance: paso a paso para convertir un vehículo de gasolina a GLP

Tecnología al alcance: paso a paso para convertir un vehículo de gasolina a GLP

En la actualidad, la conversión de vehículos a combustibles más eficientes y respetuosos con el medio ambiente es una tendencia en constante crecimiento. En este sentido, la tecnología GLP (Gas Licuado del Petróleo) se ha convertido en una opción atractiva para aquellos conductores que desean reducir los costos de mantenimiento y minimizar el impacto ambiental de su vehículo. En este artículo, presentamos un paso a paso detallado para convertir un vehículo de gasolina a GLP, brindando a los lectores una guía práctica y accesible para aprovechar los beneficios de esta tecnología innovadora.

Convierte tu coche de gasolina a GLP: paso a paso para un cambio sencillo

Las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) han revolucionado la movilidad urbana en las grandes ciudades de España, como Madrid y Barcelona. Las restricciones para las etiquetas medioambientales de la DGT son ahora la norma a seguir en los centros urbanos, y por ello muchos conductores están optando por transformar su vehículo de gasolina a GLP o gas licuado del petróleo para poder sortearlas.

El GLP es la mezcla de gases licuados a una presión moderada, compuesta por un 30% de petróleo y 70% de gas natural, lo que les permite emitir menos y, por ende, estar incluidos en la etiqueta ECO.

¿Cómo se puede cambiar un coche de gasolina a uno propulsado por GLP?

Pues una cuenta de TikTok dedicada a la ITV lo explica con todo lujo de detalles. El proceso de conversión es más sencillo de lo que parece.

Paso 1: Instalación del adaptador y la boca de carga

Lo primero que se debe hacer es poner tanto el adaptador como la boca de carga en el depósito del coche, ya que así se podrá conectar la manguera de la estación de servicio al repostar. Hay que enroscarla y apretarla fuerte antes de echar el combustible, y una vez lleno el tanque, hay que desenroscarla y cerrar la tapa.

Paso 2: Modificación del depósito

Para modificar el depósito, lo que hacen en los talleres homologados es quitar la rueda de repuesto y se instala una bombona de un tamaño muy similar, mientras que en la parte del motor hay que poner unos inyectores para que el gas licuado del petróleo pueda llegar a la unidad de potencia y así propulsar el coche. Están conectados al colector de admisión del coche, es decir, a la pieza que permite la combustión interna para que la unidad de potencia arranque.

¿Cuánto cuesta cambiar tu coche de gasolina a GLP?

Si el conductor desea alternar entre la gasolina y el gas licuado del petróleo, tan solo hace falta pulsar un botón situado (normalmente) al lado de la palanca de cambios para que llegue al motor el carburante deseado. Este cambio es cada vez más común entre los vehículos de gasolina que circulan por las carreteras de toda España, y por ello es importante conocer cómo se realiza esta transformación en el taller.

El proceso en el taller conllevará una factura que suele rondar normalmente los 1.500 euros. Eso sí, es especialmente útil si vives en el centro de una gran ciudad y tienes un coche de etiqueta B o C, ya que así podrás acceder sin problemas a las distintas ZBE.