La contaminación pasiva se ha convertido en un problema de salud pública en nuestro país. Una alarmante investigación revela que más de la mitad de los no fumadores se ven expuestos al humo del tabaco en espacios públicos, particularmente en terrazas y zonas de ocio. Esta situación es especialmente preocupante, ya que la exposición al humo de segunda mano puede tener graves consecuencias para la salud, incluyendo el aumento del riesgo de enfermedades respiratorias y cáncer. Es hora de que se tomen medidas efectivas para proteger a la población de este riesgo invisible.
Alarma en la sociedad: la mayoría de los no fumadores está expuesto al humo del tabaco en espacios públicos
Una investigación reciente revela que más de la mitad de las personas que no son fumadoras están expuestas al humo del tabaco en las terrazas de bares y restaurantes. El Estudio de tabaquismo pasivo en España 2024, presentado por la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), muestra que el 45% de los no fumadores dice estar expuesto al humo del tabaco en las terrazas españolas.
El 52% de los no fumadores se expone al humo de los cigarrillos convencionales, mientras que el 37% se expone al humo de las nuevas formas de consumo, como los vapeadores o el tabaco calentado. Esto es especialmente preocupante, ya que el 73% de los encuestados considera que respirar el humo del tabaco es molesto.
Además, el estudio destaca que el 66% de la población estaría a favor de aumentar las restricciones a la venta de productos de tabaco. La prevalencia de fumadores actuales es del 17%, pero la situación es especialmente alarmante entre la población joven: dos de cada diez jóvenes de entre 16 y 24 años son consumidores habituales de los nuevos productos de tabaco.
El secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla, ha defendido la importancia de abordar las desigualdades sociales y regular las nuevas formas de fumar que atraen a los jóvenes. Las decisiones deben ser rigurosas y viables para proteger la salud pública de manera efectiva, destacó durante la segunda Jornada SEPAR sobre Tabaquismo en España.
La investigación también destaca los espacios o escenarios donde los no fumadores están más expuestos. Destacan los hogares, con un 19% de los españoles expuestos al tabaquismo pasivo; seguidos de los centros educativos (7,5%); y los espacios de trabajo (8%). Sin embargo, la hostelería y los espacios de ocio siguen siendo los lugares de mayor exposición, con un 28%.
Este estudio pone de relieve la necesidad de tomar medidas efectivas para reducir el consumo de tabaco, especialmente entre la población joven. El Gobierno español ha marcado como objetivo atajar el consumo de tabaco de la población joven y reducir su atractivo.
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