La empresa canadiense de inversión Brookfield se ha visto atrapada en una compleja trampa financiera que la ha llevado a perder un valor considerable en su cartera de inversiones. La empresa, conocida por sus operaciones de private equity y gestión de activos, ha visto cómo su apuesta por la empresa española Grifols se ha convertido en una pesadilla financiera. La trampa financiera, estimada en 16.000 millones de euros, se debe a la combinación de una serie de operaciones financieras complejas y arriesgadas, incluyendo la compra de acciones y bonos de la empresa española. Esta situación ha generado gran inquietud en los mercados financieros y ha llevado a muchos a cuestionar la estrategia de inversión de Brookfield.
- Brookfield se enreda en una trampa financiera de millones de euros con Grifols
- La complejidad financiera de Grifols pone en peligro su futuro
- La familia Grifols y Brookfield se unen para asegurar el futuro de la farmacéutica
- La estructura accionarial de Grifols es un obstáculo para la reestructuración
- El futuro de Grifols es incierto
Brookfield se enreda en una trampa financiera de millones de euros con Grifols
Brookfield, el fondo de inversión con base en Toronto (Canadá), Nueva York y raíces brasileñas, lleva dos meses inmerso en una 'due diligence' de Grifols para decidir si, finalmente, se embarca en una operación de compra junto a los directivos y la familia Grifols para asegurar el futuro de la compañía, amenazado por una grave crisis reputacional y la losa de una deuda de 11.000 millones de euros que está disparando sus costes financieros por encima de lo sostenible a largo plazo.
La complejidad financiera de Grifols pone en peligro su futuro
La empresa farmacéutica española Grifols enfrenta una crisis financiera sin precedentes, con una deuda de 11.000 millones de euros que está ahogando sus finanzas. La situación es tan crítica que Brookfield, el fondo de inversión que ha estado estudiando la posibilidad de comprar la empresa, todavía no se ha decidido si seguir adelante con la operación.
La razón principal es la complejidad financiera de Grifols, que hace que sea difícil encontrar una solución viable para su deuda. La empresa tiene varios tipos de deuda, incluyendo bonos no asegurados y asegurados, así como deuda convertible, lo que hace que sea difícil encontrar una solución que satisfaga a todos los inversores.
La familia Grifols y Brookfield se unen para asegurar el futuro de la farmacéutica
A pesar de la complejidad financiera de Grifols, la familia Grifols y Brookfield están trabajando juntos para encontrar una solución que asegure el futuro de la empresa. La familia Grifols, que controla el 36% de la propiedad de la empresa, ha estado trabajando con Brookfield para encontrar una solución que permita a la empresa salir de la crisis financiera.
La solución más probable es una reestructuración de la deuda de Grifols, que incluiría la emisión de nuevos bonos y la renegociación de los términos de la deuda existente. Sin embargo, este proceso será complicado y requiere el apoyo de todos los inversores y acreedores de la empresa.
La estructura accionarial de Grifols es un obstáculo para la reestructuración
La estructura accionarial de Grifols es otro obstáculo para la reestructuración de la deuda. La empresa tiene dos tipos de acciones, A y B, con diferentes derechos y privilegios. Las acciones A tienen derechos políticos y económicos, mientras que las acciones B solo tienen derechos económicos.
Además, Grifols tiene programas de ADRs (American Depositary Receipts) en Estados Unidos, que son certificados equivalentes a las acciones pero negociables en dólares. Esto hace que la situación sea aún más complicada, ya que hay inversores que tienen participaciones relevantes en la empresa a través de estos programas.
El futuro de Grifols es incierto
Deja una respuesta