Chris Brown, demandado por un guardia de seguridad en uno de sus últimos conciertos
El cantante estadounidense Chris Brown se enfrenta a una nueva demanda judicial, esta vez por parte de un guardia de seguridad que trabajaba en uno de sus últimos conciertos. Según informes, el incidente ocurrió en uno de los eventos musicales del artista en los Estados Unidos, en el que el guardia de seguridad denuncia haber sido agredido físicamente por el cantante y algunos miembros de su equipo de seguridad. La demanda alega que Brown y su equipo no respetaron las normas de seguridad establecidas para el evento y que, en consecuencia, el guardia resultó herido. Este nuevo problema legal se suma a la lista de controversias en las que se ha visto envuelto el cantante en los últimos años.
Chris Brown, demandado por un guardia de seguridad en un concierto en Texas
El rapero estadounidense Chris Brown, acusado de violación y malos tratos, sigue sumando demandas a sus problemas legales. A pesar de su controvertida carrera, Brown sigue subiendo a los escenarios y realizando conciertos, lo que le supone nuevas demandas.
La última demanda se suma a las últimas, a finales de 2023, por darle una paliza a un productor musical y por un préstamo para comprar dos restaurantes de la cadena de comida rápida Popeyes.
La demanda del guardia de seguridad
El fin de semana pasado, Brown y su amigo, el músico Yella Beezy, ofrecieron un concierto en el Dickies Arena en Fort Worth, una ciudad al oeste de Dallas, en el estado de Texas. Allí, según ha podido saber el portal de noticias TMZ, estaba Frederick R. Overpeck trabajando como guardia de seguridad.
La nueva demanda de Overpeck, de 58 años, le está reclamando 15 millones de dólares (alrededor de 13,8 millones de euros) en daños y perjuicios al dúo de raperos.
La demanda se debe a una pelea que tuvo lugar en el mismo concierto, que le ha ocasionado a Brown otra demanda, en este caso de cuatro hombres que afirmaron haber sido invitados a vivir la experiencia VIP con Chris Brown después de su show.
La versión de los hechos
Según la versión de los hechos, Chris Brown ordenó a su staff que los jodieran vivos, describiendo Overpeck lo sucedido como el patio de una cárcel durante un motín. Ha asegurado el guardia de seguridad en su demanda que fue testigo de cómo un guardaespaldas de Brown, de unas 300 libras (unos 140 kilos aproximadamente), aplastó a uno de los jóvenes como si fuera un insecto.
Overpeck ha matizado que, cuando intentó intervenir, recibió multitud de golpes y patadas por parte del equipo de Yella Breezy y que incluso llegaron a asfixiarlo poniéndole una pierna en el cuello, dejándole con vértebras fracturadas y la cadera gravemente herida.
La situación es grave y Chris Brown enfrenta una nueva demanda que puede afectar su carrera.
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