¡Descubre el Secreto del Helado de Pistacho Auténtico: ¡No Necesitas Heladera!

¡Descubre el Secreto del Helado de Pistacho Auténtico: ¡No Necesitas Heladera!

¿Te gustan los helados cremosos y deliciosos, pero no tienes una heladera en casa? ¡No te preocupes! En este artículo, te revelamos el secreto del helado de pistacho auténtico que puedes preparar en el confort de tu hogar, sin necesidad de una heladera. Descubre cómo, con solo unos pocos ingredientes y un poco de paciencia, puedes disfrutar de un helado de pistacho auténtico y cremoso, sin tener que salir de casa. ¡ Prepárate para sorprender a tus amigos y familiares con este delicioso postre!

¡Descubre el Secreto del Helado de Pistacho Auténtico: ¡No Necesitas Heladera!

El helado de pistacho es un clásico italiano que triunfa en España como uno de los sabores favoritos. Aunque muchos no lo saben, lo cierto es que ese mismo helado que probamos en las heladerías artesanales más top, también podemos prepararlo, igual o mejor, en casa. ¡Ah! Y que nadie se preocupe, que no hace falta que tengamos la máquina de hacer helados, porque hay formas de hacerlos (y muy bien) sin ella.

La heladería artesanal es el equilibrio perfecto entre leche, crema, azúcares y el sabor que queremos darle. En este caso, compartimos la receta que el pastelero y heladero profesional Vladimir Dubovik ha hecho viral en Tik Tok: su versión casera y sin máquina del 'vero gelato al pistacchio italiano'.

Cómo hacer el helado viral que lleva un ingrediente sorprendente: aceite de oliva

Receta del helado de pistacho sin máquina para hacer en casa

De la misma manera que podemos hacer este sencillo helado artesanal y casero de pistacho, si no nos gusta su sabor o preferimos cualquier otro fruto seco, podemos probar a seguir las mismas instrucciones con otros productos, como por ejemplo las avellanas o las nueces.

Ingredientes del helado artesanal de pistacho sin heladera

1 kg de hielos (si podemos comprarlos ya triturados, mucho mejor, de esos chiquititos como para granizados)

570 g de leche entera

200 g de crema

80 g de azúcar blanco

150 g de pistachos pelados

Algún pistacho más para decorar al final

Así se hace el helado casero de pistacho sin máquina heladera

En primer lugar, cogemos la bolsa con el kilo de hielos y los metemos en una licuadora o robot similar para triturarlos y hacerlos más pequeños. Si hemos conseguido comprarlos ya pequeños, de esos que son para granizados, mejor que mejor. (Un truco del pastelero consiste en golpear la bolsa de hielos contra el suelo en caso de no tener con qué triturarlos).

En paralelo, ponemos una cazuela alta al fuego para calentar la crema (nata), la leche entera y el azúcar. Vamos removiendo sin parar con una espátula suave de silicona para evitar los grumos.

Una vez está caliente la mezcla (no arrebatarla, no poner el fuego alto sino medio), le agregamos pasta de pistacho.

La pasta de pistacho se consigue moliendo los pistachos pelados y sin la pielecita rojiza. Puedes hacerlo en una licuadora, en tandas de 15 segundos para evitar que se te queme la máquina. Si lo ves complicado, siempre podrás agregarle un poquito de aceite para que emulsione la mezcla. Una vez unificado todo, a 85 grados, dejamos enfriar la mezcla antes de pasarla al bol helado.

Cuando se ha enfriado, y su textura es aún muy líquida, la agregamos a un bol ancho y profundo que habremos colocado encima de otro bol más grande con hielos y sal en la base: 300 gramos por cada kilo de sal, para que se mantenga bien frío mientras removemos con un batidor manual de varillas.

A partir de aquí, mucha paciencia mezclando con las varillas sin prisa pero sin pausa, hasta que obtengamos la textura cremosa del helado artesano.

Para emplatar, puedes poner toppings de trocitos de pistacho y… ¡listo!

Esta es la razón por la que no debes quitarle la piel a los pistachos

Propiedades del pistacho contra el estrés post-vacacional

De sobra conocidos son los efectos antioxidantes de los pistachos, su alto contenido en fibra y proteína, su escaso aporte de grasas y su capacidad para controlar la glucemia postpandrial (la de después de las comidas). Hoy, vamos a analizar los 10 micronutrientes de este fruto seco tan popularizando en España, que pueden ayudarnos cuando nos toque reincorporarnos a la rutina habitual.

Los pistachos son unos frutos secos antioxidantes con innumerables beneficios para el organismo.

En la cabeza de la lista nos encontramos con la tiamina, una vitamina del grupo B1 que interviene en la transformación de los alimentos en energía, y, que a la vez, participa en la absorción de glucosa por parte del sistema nervioso. La tiamina ayuda a evitar la depresión, el cansancio o la pérdida de habilidades mentales.

En segundo lugar está la riboflavina o vitamina B2, imprescindible para metabolizar los hidratos de carbono y aminoácidos necesarios para producir la energía que el cuerpo necesita. En 100 gramos de pistacho se concentran 0,23 mg.

La piridoxina ayuda a la formación de neurotransmisores como la dopamina y la serotonina; actúa en la formación de glóbulos rojos y en el metabolismo de las proteínas. El déficit de determinados neurotransmisores puede afectar a la capacidad cognitiva y conducir a estados de fatiga, depresión, ansiedad y dolor corporal.

La piel morada que tienen los pistachos no debe quitarse.

Su aporte de ácido fólico contribuye a mantener el cerebro en funcionamiento; el ácido pantenoico (vitamina B5) contribuye a una correcta formación y funcionamiento de las neuronas; y la biótica promueve la función cerebral. Por lo que respecta al magnesio, este mineral aporta un gran equilibrio mental ya que estimula la transmisión de impulsos nerviosos y es un poderoso remedio antiestrés gracias a su contribución en la mejora el sueño.

Además, los pistachos contienen potasio, electrolito principal en la regulación de funciones corporales básicas como la función nerviosa y la muscular; flavonoides como las catequinas, un compuesto fenólico de origen natural que ayuda a proteger las células cerebrales del estrés oxidativo, reduciendo el daño cognitivo; y las antocianinas. Estudios recientes demuestran que seguir una dieta con, al menos media ración diaria de alimentos con alto contenido en flavonoides, puede reducir el 20% el riesgo de deterioro cognitivo; y, a su vez, ofrecer un mayor efecto protector del cerebro.

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