Descubre la Sencillez Gastronómica de Zamora: Tiberios y Otras Dos Recetas de Tapas Típicas para Preparar en Casa

La ciudad de Zamora es conocida por su rica tradición gastronómica, que se caracteriza por la sencillez y la autenticidad de sus platos típicos. En este artículo, vamos a dar a conocer tres deliciosas recetas de tapas zamoranas que podrás preparar con facilidad en el confort de tu propio hogar. Entre ellas, destacamos los Tiberios, un clásico de la gastronomía zamorana que sorprenderá a tus invitados con su sencillo pero intenso sabor. A continuación, te presentamos las recetas de estos tres platillos típicos, que te permitirán disfrutar de la esencia de la cocina zamorana sin necesidad de salir de casa.

Descubre la Sencillez Gastronómica de Zamora: Tiberios y Otras Dos Recetas de Tapas Típicas para Preparar en Casa

Preparar en casa tapas típicas de otras ciudades puede ser muy divertido y enriquecedor. Una de las costumbres más placenteras es viajar por la geografía de España y degustar en cada ciudad, cada pueblo y cada rincón esa tapa típica que les caracteriza, que tiene historia, que está elaborada con años de tradición y con recetas que pasan de padres a hijos, en muchas ocasiones mejoradas.

En esta ocasión, nuestro destino es Zamora, ciudad señorial de Castilla y León en la que saborear sus míticos mejillones sin tomate y en salsa de pimentón, los tiberios, que nacieron en el bar Bambú; probar esas brochetas de cerdo que, aunque sencillas, encierran 60 años de práctica de los dueños del bar El Lobo; o esa salsa gelatinosa de callos que acompaña a la jugosísima tortilla de El Chillón.

Tiberios y más: descubre la sencillez gastronómica de Zamora sin salir de casa

Pero vamos más allá. En el caso de que no tengáis previsto viajar a Zamora próximamente, que nadie se preocupe, porque vamos a poner los cinco sentidos para que podáis emular en casa estos bocados deliciosos que en aquella ciudad tienen colas de fans que aumentan alimentadas por el boca a boca (y nunca mejor dicho).

Primera parada: los tiberios, mejillones en una salsa única

Para comenzar descubriendo qué son los tiberios, os diremos que se trata de unos mejillones con su concha, que se sirven con abundante salsa, pero que no incluyen en su elaboración el tomate. Esta receta es originaria de un bar de Zamora, el Bambú, que los ha hecho tan famosos que muchos turistas tienen apuntada en su hoja de ruta esta parada obligada.

Los mejillones tiberios no llevan tomate entre sus ingredientes.

Así pues, los mejillones llamados tiberios en la ciudad castellana pueden prepararse con más o menos cayena, más o menos ajo, con pimentón dulce o picante…

El primer paso para hacer los tiberios en casa va a consistir en limpiar bien estos moluscos tan económicos, limpiando las adherencias exteriores, y cocerlos en agua con sal. En apenas unos minutos veremos que se han abierto, lo cual significa que están en su punto. Ojo, que los que no se hayan abierto, es porque tienen algún problema y deben desecharse de forma automática. Una vez cocidos, les quitamos una de sus dos conchas.

Así se prepara la salsa (picante o no) de los tiberios

En primer lugar, y una vez tenemos los mejillones frescos cocidos y reservados, vamos a preparar la salsa que les da vidilla. Para ella, picamos finamente media cebolla dulce y un diente de ajo grande y los rehogamos en una sartén con un poquito de aceite de oliva virgen extra.

Incorporamos una cayena (en función del nivel de picante que deseemos y estemos dispuestos a asumir) y una cucharada de pimentón (dulce o picante). Una recomendación que suele funcionar es mezclar ambos tipos de pimentón, para lograr la mezcla perfecta. A continuación, removemos y añadimos poco a poco el caldo resultante de haber cocido los mejillones, junto con un poco de harina integral para que la salsa vaya espesando. En este punto, nos ayudamos del agua para aligerar o espesar, según el gusto.

Seguimos para bingo: tortilla con salsa de callos

Típica del bar Chillón de Zamora, la tortilla con salsa de callos es un verdadero espectáculo. Si quieres hacerte una idea preparándola en casa, sigue estos tips que te desvelamos a continuación.

Los callos, transformados en una salsa más o menos líquida, son el acompañamiento perfecto de la tortilla de patatas tradicional.

En primer lugar, tenemos que preparar una tortilla de patata sin cebolla jugosa y apetecible. Patatas, huevo y sal, paciencia, vuelta y vuelta, y dejarla al punto que cada uno prefiera.

Para comenzar a elaborar los callos a partir de los cuales vamos a elaborar la salsa ponemos en el baso triturador de nuestro robot de cocina dos dientes de ajo enteros y pelados, pimiento rojo y verde, almendras, perejil y pan. Trituramos. En una cazuela con un poco de aceite de oliva virgen extra echamos la mezcla del robot y rehogamos, junto con una cayena y un poco de sal.

Pinchos morunos especiales: uno que sí, uno que no

Aunque existen tapas y aperitivos con una elaboración leonina, lo cierto es que en numerosas ocasiones es en las propuestas más sencillas, con materia prima de calidad, donde vamos a encontrar los bocados más suculentos.

Los pinchos morunos pueden hacerse a la brasa, en plancha o incluso en la sartén.

Esto es lo que le sucede a los pinchos morunos del bar zamorano El Lobo, que llevan más de 60 años elaborando sus famosos pinchos morunos, brochetas con carne de cerdo que puedes pedir con picante o sin él.

Así pues, en el caso de que quieras emular en casa esta receta, será fundamental que consigas una carne de excelente calidad para poner a la brasa con carbón de leña. En el bar es especialmente característico su grito de guerra, el que recorre toda la barra de camarero en camarero y que solo cuenta con dos opciones uno que sí o uno que no. Como habréis imaginado, hace referencia al picante, al gusto del consumidor.

Nuestra versión de los morunos a base de carne de cerdo requiere de un ligero marinado en una mezcla de ajo, cebolla, cilantro, limón, aceite de oliva, pimentón, hebras de azafrán, pimienta y sal. Batimos con un robot de cocina y, con la pasta resultante, hacemos que se impregne la carne (removiendo bien) durante 24 horas en la nevera. Tapamos con papel film.

Una vez marinados, colocamos los tacos de carne en el pincho de madera y, si los vamos a hacer a la barbacoa, mejor remojar la madera para que no se queme. Esta misma receta la puedes utilizar para otros productos más allá del cerdo, como el chorizo, por ejemplo.