La vida de los famosos siempre ha sido objeto de fascinación y especulación. Sin embargo, pocas veces se descubre una verdad que sacude la opinión pública como la que hoy te presentamos. Patrick Swayze, el actor que conquistó corazones con su papel de Johnny Castle en la película 'Dirty Dancing', escondió un secreto durante toda su vida. Un hijo secreto, fruto de una relación extramatrimonial, que llevó una vida paralela a la del actor. Jason Whittle, el vástago no reconocido del actor, es el centro de este escándalo que hace tambalear la imagen de uno de los más grandes ídolos de Hollywood. ¿Quieres saber más sobre la vida de este joven y cómo su existencia afectó la vida de Patrick Swayze? ¡Sigue leyendo para descubrir la verdad!
El secreto de Patrick Swayze: descubre la vida de Jason Whittle, el hijo desconocido del actor de 'Dirty Dancing'
La carrera cinematográfica de Patrick Swayze es ampliamente conocida, con títulos como 'Ghost' (1990), 'Le llaman Bodhi' (1991), 'La ciudad de la alegría' (1992) y 'A Wong Foo, ¡gracias por todo! Julie Newmar' (1995). Sin embargo, su vida personal es menos explorada, y en particular, su relación con su esposa, la actriz y coreógrafa Lisa Niemi.
Swayze y Niemi se casaron en 1975, cuando él tenía veintitrés años y ella diecinueve. La pareja estuvo unida durante más de tres décadas, hasta la muerte del actor en 2009, a los cincuenta y siete años, a causa de un cáncer de páncreas. En sus memorias, The Time of my Life, Swayze expresó su sentimiento de aplastado por el dolor por no haber podido tener un hijo con su esposa.
Un hijo desconocido
Pero lo que Swayze no sabía es que, en realidad, tenía un hijo. Jason Whittle, nacido en 1970, es el fruto de una noche fortuita con Bonnie Kay, quince años antes de que Swayze comenzara su relación con Niemi. Kay nunca le reclamó la paternidad al actor y, según las palabras de la viuda de Swayze, él nunca supo de la existencia de Jason.
Jason Whittle creció sin saber quién era su padre. Fue hasta 2012, poco antes de que su madre falleciera, cuando Kay le contó la verdad sobre su padre. Para entonces, Whittle ya había hecho una carrera como jugador profesional de fútbol americano, formando parte de los New York Giants y de los Minnesota Vikings.
Whittle quiso comprobar si la historia de su madre era cierta y se sometió a una prueba de paternidad, que confirmó que, en efecto, era hijo biológico de Patrick Swayze.
Una vida fuera del foco mediático
A pesar de la sorprendente noticia, Whittle decidió no reclamar su parte de la posible herencia y optó por mantener un perfil bajo. Algunos rumores sugieren que Niemi llegó a un acuerdo extraoficial con él, pero nunca se ha confirmado de manera pública.
Actualmente, Jason Whittle es propietario de una reconocida franquicia inmobiliaria en la zona del Lago Ozark, en Missouri. Aunque ya retirado del deporte y alejado del foco mediático, Whittle sigue siendo una figura enigmática, con una vida que ha logrado mantener fuera de la atención pública.
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