Descubrimiento impactante: Astrónomos revelan el hallazgo de un agujero negro supermasivo que está asfixiando a una galaxia gigante, similar en tamaño

Descubrimiento impactante: Astrónomos revelan el hallazgo de un agujero negro supermasivo que está asfixiando a una galaxia gigante, similar en tamaño a la Vía Láctea

En un sorprendente descubrimiento, un equipo de astrónomos ha revelado la existencia de un agujero negro supermasivo que está ejerciendo un dominio letal sobre una galaxia gigante, similar en tamaño a la nuestra Vía Láctea. Esta extraordinaria observación ha generado un gran interés en la comunidad científica, ya que proporciona nuevas perspectivas sobre la formación y evolución de las galaxias en el universo. El equipo de investigadores, utilizando avanzadas técnicas de observación, ha logrado detectar la presencia de este monstruo cósmico, que está asfixiando a la galaxia, impidiendo su crecimiento y desarrollo.

Agujero negro supermasivo asfixia a galaxia gigante similar a la Vía Láctea

Un equipo de astrónomos ha realizado un descubrimiento impactante en el universo temprano, encontrando una galaxia gigante que está prácticamente muerta y no puede formar nuevas estrellas. La razón es que en su centro alberga un agujero negro supermasivo que le está cortando el suministro de alimento.

La investigación, liderada por el Centro de Astrobiología (CAB) del CSIC-INTA y la Universidad de Cambridge (Reino Unido), se basó en observaciones hechas con el telescopio espacial James Webb (JWST) y se ha publicado en la revista Nature Astronomy.

La Galaxia de Pablo

La galaxia, denominada GS-10578 y apodada Galaxia de Pablo, se formó en el universo temprano, unos dos mil millones de años después del Big Bang, y tiene una masa similar a la de la Vía Láctea. Su masa total es de unos 200.000 millones de veces la masa de nuestro Sol, y la mayoría de sus estrellas se formaron hace entre 12,5 y 11,5 mil millones de años, cuando el Universo tenía un 15% de su edad actual.

Los astrónomos querían entender cómo se formaron las galaxias cercanas que son tan o más masivas que la Vía Láctea y, para ello, con la ayuda del Hubble, buscaron posibles progenitores de distintas épocas de la historia del universo. GS-10578 era lo que llamaban una pepita azul, un posible progenitor muy interesante que se encuentra en una etapa evolutiva donde una enorme cantidad de estrellas se formaron muy temprano y rápidamente en un volumen muy pequeño, con una enorme densidad.

El agujero negro asesino

Al observar la galaxia con el Webb, el equipo vio que está expulsando grandes cantidades de gas a velocidades de unos mil kilómetros por segundo y que estos vientos rápidos estaban siendo expulsados de la galaxia por el agujero negro.

El agujero negro está matando a esta galaxia y manteniéndola inactiva, al cortar la fuente de 'alimento' que necesita para formar nuevas estrellas, explica Francesco D'Eugenio, del Instituto Kavli de Cosmología de Cambridge.

Las estrellas que se ven en GS-10578 no son muy jóvenes, lo que indica que la formación estelar se ha apagado. Sin embargo, aún persisten algunas propiedades intrigantes de esta galaxia, como la gran emisión en el infrarrojo medio y lejano que apunta a la presencia de nubes de polvo alrededor del agujero negro supermasivo o un brote de formación estelar reciente que está tan oscurecido por ese polvo que es completamente invisible con nuestros datos actuales de JWST.

Un descubrimiento esperado, pero no visto antes

Aunque modelos teóricos anteriores habían predicho que los agujeros negros tenían este efecto en las galaxias, antes de Webb no había sido posible detectar este efecto directamente. Estos modelos afirmaron que el fin de la formación estelar tiene un efecto violento y turbulento en las galaxias, destruyendo su forma en el proceso, pero las estrellas de esta galaxia en forma de disco todavía se mueven de forma ordenada, lo que sugiere que no siempre es así.