Desmitificando la menopausia: 7 creencias comunes desmentidas por los expertos

Desmitificando la menopausia: 7 creencias comunes desmentidas por los expertos

La menopausia, un proceso natural en la vida de las mujeres, sigue rodeado de mitos y creencias erróneas. A pesar de ser un tema de gran interés y relevancia, muchas mujeres siguen viviendo con inquietudes y dudas sobre lo que realmente sucede durante esta etapa. Sin embargo, gracias a la investigación y el avance en la medicina, los expertos en salud han logrado desmentir algunas de las creencias más comunes y arraigadas sobre la menopausia. En este artículo, exploraremos 7 mitos comunes que han sido desmentidos por la ciencia, con el fin de brindar una visión más clara y precisa sobre este proceso natural y crucial en la vida de las mujeres.

Desmitificando la menopausia: creencias comunes desmentidas por los expertos

La palabra menopausia proviene del griego, siendo mēnós 'mes' y paûsis 'cesación'. Así pues, se define como la época en la vida de la mujer en la que deja de tener menstruaciones. Como definición médica, se entiende menopausia como la época de la mujer en la que lleva un año o más sin ellas.

En esta etapa de la vida de la mujer se acaba la vida fértil de los ovarios y con ello se dejan de producir todas aquellas hormonas que producen las ovulaciones y desencadenan los sangrados menstruales. Las protagonistas de estos procesos son el estradiol y la progesterona. A este hecho, objetivo, se suman innumerables medias verdades o directamente mitos, que no hacen honor a la realidad y que pueden dar una idea distorsionada de la menopausia.

Mitos de la menopausia: ¿la verdad sobre los síntomas y el envejecimiento?

Con la ayuda de un buen número de especialistas hemos detectado cuáles son los siete mitos más extendidos, con el objeto de desmontarlos. Si sigues leyendo, seguro que más de uno 'te suena'.

1. No te vas a librar de ningún síntoma, y 'toca aguantarse'

Los sofocos, los cambios repentinos de humor, el empeoramiento del descanso nocturno, la pérdida de calidad de la piel y el cabello, la sequedad vaginal, o la disminución de la líbido son algunos de los síntomas que a priori se presuponen en la menopausia. Sin embargo, ni tienes que sufrirlos todos, ni en la misma intensidad. Tampoco hay que conformarse y aguantar.

¿Acaso un adolescente con acné severo va al médico y éste le manda a casa porque es 'normal'? Alguno de la vieja escuela lo haría, porque 'es típico de la adolescencia', pero es un problema de salud que se puede tratar y la mayoría de los médicos actúan o derivan a un dermatólogo para darle solución.

Pues lo mismo debería ocurrir para tratar los síntomas de la menopausia que perjudican la calidad de vida de la mujer. En este caso se puede dar tratamiento hormonal sustitutivo (si los antecedentes médicos lo permiten): fitoterapia, tratamientos vitamínicos, pomadas apropiadas para la zona íntima… Incluso, si el caso lo requiere, cirugía reparativa o aplicación de láser u otras tecnologías de ginecología.

2. Hay que esperar a las alteraciones físicas o analíticas para actuar

No hay que esperar a los signos evidentes para empezar a suplementarse y evitar los síntomas. La doctora Ana Neves de Clínica FEMM aclara que para una mujer en la menopausia, la prevención de complicaciones como la osteoporosis, enfermedades cardiovasculares y alteraciones cognitivas es fundamental para asegurar una mejor calidad de vida en los años siguientes.

Existe un gran número de medidas farmacológicas y no farmacológicas, centradas en los hábitos de vida, que son útiles para mejorar la salud de la mujer en este periodo de la vida. Cuanto antes se actúe, más beneficios se obtendrán de dichas medidas.

3. En la menopausia vas a engordar sí o sí

La caída del estrógeno es el principal factor de los trastornos que ocurren en esta etapa, incluido el aumento de peso. Sin embargo, la disminución de esta hormona puede estar asociada a un empeoramiento de los hábitos de vida debido al surgimiento concomitante de fatiga, un cuadro depresivo leve, cambios en el paladar o trastornos del sueño.

Debido a los desequilibrios hormonales de esta etapa, el almacenamiento de grasa en la cintura, abdomen, caderas y muslos puede aumentar. Sin embargo, con una dieta equilibrada y adecuada, y con ejercicio físico regular este aumento se puede controlar.

4. Sólo es un proceso biológico, no psicológico

Aunque los cambios biológicos son el núcleo de la menopausia, la dimensión psicológica de esta etapa también es significativa según todos los expertos. Algunas mujeres reportan sentirse más libres y empoderadas durante la menopausia, ya que se liberan de las preocupaciones de la menstruación y la anticoncepción.

Para muchas, la menopausia simboliza una nueva fase de vida caracterizada por el crecimiento personal y la autoconciencia. Las fluctuaciones hormonales pueden afectar el estado de ánimo, pero también pueden abrir nuevas oportunidades para explorar emociones y desarrollar resiliencia emocional.

5. Con la menopausia, el envejecimiento se acelera

Aunque la menopausia marca el final de la etapa reproductiva, no significa un acelerado envejecimiento. De hecho, muchas mujeres encuentran que con los cuidados adecuados, una buena alimentación, ejercicio regular y una atención médica oportuna, pueden mantener una salud y vitalidad óptimas durante décadas.

6. Disminuye el deseo sexual

La doctora Suero quiere detenerse en el punto del descenso de la líbido durante la menopausia: Muchas mujeres experimentan una disminución de la libido a medida que envejecen, pero es complejo definir qué es un deseo sexual normal y qué factores tienen mayor impacto sobre el mismo.

Otros síntomas de la menopausia, como cambios de humor, trastornos del sueño o sequedad vaginal, pueden afectar la función sexual. Debemos decir que cuando se tratan estos problemas, la función sexual mejora en muchas pacientes.

7. Prepárate para las pérdidas de orina

Como último mito a desmontar, Daniel Galindo Esquejar, experience & innovación director de VivaGym aporta información sobre las presuntas pérdidas de orina. Debemos entender que la menopausia lleva consigo una pérdida muscular importante y que, si no hacemos nada, esa falta de tono muscular puede traernos algunos problemas como incontinencias, osteoporosis, etc.

Pero, como podemos prevenirlo, podemos evitarlo, 'pasando a la acción cuanto antes haciendo ejercicios de fortalecimiento de suelo pélvico, así como entrenamiento general de fuerza. Con todo ello podremos evitar cualquier tipo de problema relacionado con la incontinencia'.