El arte de pedir un cambio de asiento en vuelo: Consejos de una experta en etiqueta para no ofender a tus compañeros de viaje

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El arte de pedir un cambio de asiento en vuelo: Consejos de una experta en etiqueta para no ofender a tus compañeros de viaje

Cuando se trata de viajar en avión, el asiento asignado puede ser un tema de gran importancia para muchos pasajeros. Sin embargo, en ocasiones, la ubicación no es la ideal y se vuelve necesario solicitar un cambio. Pero, ¿cómo pedir un cambio de asiento sin ofender a tus compañeros de viaje? En este artículo, una experta en etiqueta comparte sus valiosos consejos para hacerlo de manera educada y respetuosa. Aprende a pedir con tacto y diplomacia y asegúrate de disfrutar de un viaje más cómodo y agradable.

Cómo pedir un cambio de asiento en vuelo sin ofender a tus compañeros de viaje

Cómo pedir un cambio de asiento en vuelo sin ofender a tus compañeros de viaje

Subir a un avión y no haber elegido asiento puede llevar a situaciones incómodas, como quedar separados de amigos o familiares. En estas circunstancias, es común que surjan cambios de sitio entre pasajeros. Sin embargo, abordar a un pasajero para pedirle un cambio de asiento puede ser un proceso delicado.

Según Diane Gottsman, gurú de la etiqueta y especialista en comportamiento de adultos, es fundamental tener en cuenta ciertas reglas de cortesía al solicitar un cambio de asiento. En primer lugar, solo debes solicitar el cambio si puedes ofrecer un asiento equivalente a cambio. Por supuesto, tú deseas seleccionar un pasajero al que pueda ofrecerle intercambiar un asiento igual o mejor para poder sentarte al lado de un amigo o familiar, afirma.

Es importante evitar preguntar a alguien que viaje en una clase de cabina superior o que tenga una mejor posición de asiento. Por ejemplo, si estás en un asiento del medio, no sería cortés pedirle a alguien en un asiento del pasillo que lo cambie a menos que sea absolutamente necesario.

Jackie Vernon-Thompson, fundadora de From the Inside-Out School of Etiquette, agrega: Al hacer arreglos, se tienen en cuenta la conveniencia y la comodidad. Es posible que algunos tengan piernas más largas y hayan pagado tarifas adicionales por ese espacio extra para las piernas. A otros les puede resultar más cómodo apoyar la cabeza en el lado cercano a la ventana, o puede que les guste la sensación acogedora cerca de la ventana.

Pedirle a un compañero de viaje que cambie de asiento, muy probablemente, lo colocará en una posición incómoda, explica Jackie Vernon-Thompson.

Otra experta, Jodi RR Smith, de Mannersmith Etiquette Consulting, también aconseja sobre la mejor manera de preguntar. Sabemos por estudios psicológicos que las personas tienen más probabilidades de acceder a una solicitud cuando existe una razón establecida. Asegúrate de incluir un motivo. Es perfectamente aceptable negarse a cambiar de asiento, afirma.

Lucía García

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