En un movimiento que supone un desafío directo al Ejecutivo y al Banco de Sabadell, el BBVA ha presentado su oferta pública de adquisición en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) sin realizar cambios significativos en las condiciones iniciales. Esta decisión puede tener consecuencias importantes en el panorama bancario español y europeo. La oferta del BBVA surge en un momento clave para la entidad financiera, que busca expandir su presencia en el mercado español y fortalecer su posición en la región. A continuación, analizaremos las implicaciones de esta oferta y las posibles respuestas del Ejecutivo y del Sabadell en este juego de estrategia financiera.
BBVA lanza desafío al Gobierno y Sabadell con oferta pública de adquisición sin cambios
El presidente de BBVA, Carlos Torres Vila, ha decidido dar un paso adelante en la adquisición del Banco Sabadell, presentando una oferta pública de adquisición (OPA) hostil sin cambios significativos en las condiciones iniciales.
La oferta, que mantiene una prima del 30% sobre el precio de cotización del pasado 29 de abril y un canje de acciones de 1 título por cada 4,83, busca crear el tercer mayor banco de Europa.
Un proceso complicado
El camino hacia la adquisición no será fácil, ya que BBVA debe obtener todos los permisos regulatorios y convencer al accionariado de Banco Sabadell, que tiene un alto grado de atomización.
Además, el Banco Sabadell ha advertido que esta oferta derivará en múltiples incertidumbres en medio de todos los procesos regulatorios por los que debe pasar, y cuyos plazos se pueden alargar más allá de los seis a ocho meses que estima BBVA.
Una operación hostil
La iniciativa del BBVA se convierte así en una operación hostil, ya que no se ha acordado nada con el Banco Sabadell de antemano.
Además, el Gobierno, liderado por Pedro Sánchez, se ha mostrado contrario a esta operación, ya que considera que supone una concentración de mercado que puede afectar al negocio y a los trabajadores de ambos grupos.
El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, también se ha opuesto a esta operación, lo que hace que el camino hacia la adquisición sea aún más complicado.
Una batalla política
La OPA se produce en plenas negociaciones del PSOE con los nacionalistas catalanes para formar el nuevo Govern, lo que puede influir en el resultado final de la propuesta.
Los partidos y fuerzas vivas de Cataluña también se oponen a la operación, ya que consideran que el Banco Sabadell es un banco tradicional catalán y vinculado con la mayoría de sus pymes dentro y fuera de España.
Por el contrario, desde BBVA se confía en que el Ejecutivo acabará entendiendo las bondades de la operación.
Una respuesta del Banco Sabadell
El Banco Sabadell ha respondido con un documento de mil folios entregado a la CNMV, en el que se advierte que la OPA puede suponer un duro golpe a sus negocios y a sus clientes.
Entre los argumentos presentados por el Banco Sabadell se encuentra la capacidad de generar créditos fiscales por 4.700 millones de euros en los próximos cuatro años, lo que demuestra que la propuesta de BBVA no valora de forma suficiente los activos del Sabadell.
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