En un movimiento estratégico que ha generado gran revuelo en la región, Israel ha lanzado un ataque discriminado contra Hezbolá, la milicia chií libanesa considerada una de las más poderosas del Medio Oriente. El objetivo principal de esta operación es desestabilizar a la milicia y debilitar su capacidad para responder a una posible operación terrestre en el Líbano. Esta acción militar tiene como fin anticipar y prevenir cualquier intento de Hezbolá de atacar a Israel, y así garantizar la seguridad de su territorio y población. La comunidad internacional observa con atención este desarrollo, que puede tener graves consecuencias en la región.
- La frontera entre Israel y Líbano se convierte en un campo de batalla: Hezbolá y el Ejército israelí intercambian ataques
- El último episodio: explosiones simultaneas de dispositivos sospechosos de Hezbolá
- Objetivos militares
- La hipótesis de una operación militar terrestre
- La reacción de Hezbolá y el Gobierno libanés
- La implicación de actores regionales
- La relación entre Israel y Líbano
La frontera entre Israel y Líbano se convierte en un campo de batalla: Hezbolá y el Ejército israelí intercambian ataques
La vida en la frontera entre Israel y Líbano se ha vuelto cada vez más tensa. Los habitantes de la región viven con la constante sensación de que en cualquier momento el impacto de un mortero romperá la calma. Desde el 8 de octubre de 2023, cuando Hezbolá comenzó a lanzar cohetes diariamente contra el norte de Israel como respuesta a la ofensiva en Gaza, la región se ha convertido en un campo de batalla.
El último episodio: explosiones simultaneas de dispositivos sospechosos de Hezbolá
El último episodio de violencia se produjo esta semana con las explosiones simultaneas de buscas y walkie-talkies de miembros de Hezbolá, que se atribuye al Mossad, el servicio de inteligencia de Israel. Las detonaciones de los miles de dispositivos entre el martes y el miércoles han dejado 37 muertos, entre ellos dos menores, y cerca de 3.000 heridos, de los cuales 1.400 continúan con heridas graves o moderadas, según el Ministerio de Salud libanés.
Objetivos militares
Javier Gil Guerrero, profesor de relaciones internacionales de Comillas ICADE, asegura que el sentido de hacer estallar los dispositivos era crear caos y confusión en toda la estructura y la cadena de mando de Hezbolá para aprovechar y atacar. No es descartable una operación militar terrestre, porque si no, Israel habría perdido el elemento sorpresa y quemado una carta muy importante que nadie sabía que tenía, afirma.
La hipótesis de una operación militar terrestre
El secretario general de la ONU, António Guterres, ha afirmado que obviamente, la lógica de hacer explotar todos estos dispositivos es hacerlo como un ataque preventivo antes de una operación militar importante. Salvador Sánchez Tapia, general de brigada del Ejército de Tierra e investigador principal del Center for Global Affairs & Strategic Studies, no descarta que la intención de Israel fuera únicamente desarticular el sistema de mando y control de comunicación de Hezbolá.
La reacción de Hezbolá y el Gobierno libanés
El líder de Hezbolá, Hasán Nasrala, ha reconocido que sí han recibido un golpe duro y severo, pero ha añadido que la población libanesa no caerá, sino que se hará más fuerte y se prepara para lo peor. Sin embargo, Hezbolá no es Líbano y la compleja estructura política y social libanesa arrastrada desde la guerra civil que terminó en 1990 y la guerra de principio de siglo con Israel ha dejado un país en constante conflicto interno entre confesiones religiosas y sectores sociales.
La implicación de actores regionales
Siria e Irán observan de reojo el conflicto en Líbano. En las últimas semanas Israel ha intensificado sus bombardeos a territorio sirio, sin embargo el Gobierno de Bashar Al Asad solo ha respondido con una denuncia pública. Algo parecido ha ocurrido con Irán, que después del asesinato en su territorio del líder de Hamas, Ismail Haniya, ha dicho que se reserva el derecho a responder, pero por el momento no se ha producido un episodio como el del pasado mes de abril, en el que Teherán e Israel se bombardearon mutuamente.
La relación entre Israel y Líbano
La relación entre Israel y el Líbano es mucho más compleja de lo que a simple vista podría parecer y una guerra es una garantía de más fisuras sociales y políticas, apunta el profesor de Comillas ICADE. La sociedad libanesa no está lista para una guerra abierta y el Gobierno libanés se preocupa por mantener al país unido después de años de inestabilidad política, corrupción, señalamientos sociales y con una economía arruinada.
Fuente: 20minutos
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