El majestuoso Castillo de Castel dell'Ovo en Nápoles, un baluarte del mar con una fascinante leyenda detrás
En el pintoresco puerto de Nápoles, Italia, se yergue un imponente monumento que ha sido testigo de la historia de la ciudad durante siglos. El Castillo de Castel dell'Ovo, situado en la punta del puerto, es un baluarte del mar que ha resistido el paso del tiempo y ha sido escenario de importantes eventos históricos. Pero lo que hace que este lugar sea aún más atractivo es la fascinante leyenda que se esconde detrás de sus murallas. Según la tradición, el castillo fue construido sobre una cueva donde se refugió el poeta romano Virgilio, quien habría escondido un huevo mágico que protegería la ciudad de los desastres marinos. ¿Quieres descubrir más sobre este lugar emblemático?
El Castillo de Castel dell'Ovo: un baluarte del mar con una leyenda fascinante detrás
Las ciudades de Italia están repletas de un patrimonio arquitectónico casi inigualable. Florencia, Roma, Milán o Nápoles tienen maravillas en casi cada rincón de su casco histórico, y los turistas que viajan desde España se quedan impresionados cuando las ven con sus propios ojos. Justo en 'la ciudad de los siete castillos' se encuentra uno de los fortines más espectaculares de todo el país transalpino: el Castel dell'Ovo.
Su nombre, que significa literalmente 'Castillo del Huevo', está ligado a una leyenda protagonizada por uno de los nombres más importantes de la literatura universal, Virgilio. Además, su ubicación en el Golfo de Nápoles, a orillas del Tirreno, le convierte en uno de los más especiales dentro de los siete fortines que se pueden visitar en el casco histórico de la tercera ciudad más poblada de Italia.
La leyenda del huevo mágico
Según se dice, el autor de la Eneida escondió un huevo mágico de la sirena Parténope en el sótano del castillo, bajo los cimientos del fortín, para que la ciudad estuviera a salvo y la fortaleza no se derrumbara. Lo encerró en una jaula para preservarlo y, bien sea por esta mística protección o no, el Castel dell'Ovo lleva casi 900 años en pie.
A lo largo de esos siglos ha tenido usos muy distintos. Desde ser una fortaleza militar para vigilar la ciudad de Nápoles, pasando por una cárcel e incluso residencia real, tan solo se pueden visitar algunas estancias que se encuentran intramuros (aunque actualmente está cerrado al público debido a trabajos de restauración).
Desde un eremitorio basiliano, pasando por las celdas y por salas con frescos bizantinos y bóvedas góticas, el Castel dell'Ovo es sin duda uno de los imprescindibles si se viaja a Nápoles.
Un lugar fascinante y único en el paseo marítimo de Nápoles
Así definen en la web de turismo de Italia a esta imponente fortaleza erigida en el 1128 en el islote de Megaride, desde el que domina todo el golfo napolitano. Su origen se remonta a la época romana, aunque el aspecto actual es obra de los normandos.
Además, al estar situado justo a orillas del Tirreno, llegar hasta él es toda una delicia, ya que se puede acceder tras pasear por la zona de Borgo Marinari con el Monte Vesubio a lo lejos. Desde luego, el Castel dell'Ovo es una de las grandes maravillas de Nápoles y una parada obligatoria si se visita la capital de la Campania.
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