El Precio de la Fidelidad: Descubre las Claves para Asumir las Consecuencias de Ser Loyal a Alguien o Algo

El Precio de la Fidelidad: Descubre las Claves para Asumir las Consecuencias de Ser Loyal a Alguien o Algo

La fidelidad es un valor que se considera fundamental en cualquier relación, ya sea personal o profesional. Sin embargo, ser leal a alguien o algo puede tener un costo que no siempre se tiene en cuenta. En este artículo, vamos a profundizar en el precio de la fidelidad, explorando las consecuencias que conlleva ser fiel a una persona, una empresa o una causa. ¿Cuáles son los beneficios y los ruegos que se deben asumir cuando se decide ser leal? ¿Cómo se puede equilibrar la lealtad con la propia identidad y libertad? A continuación, descubra las claves para asumir las consecuencias de ser fiel y tomar decisiones informadas en sus relaciones.

¿Qué precio estás dispuesto a pagar por ser fiel a ti mismo?

Mantener en buen estado nuestra salud mental es una premisa cada vez más difícil de conseguir por múltiples obstáculos sociales, entre los que predomina el hecho de que debamos hacer siempre 'lo correcto' y no sacar los pies del tiesto. Aunque en un principio, seguir la corriente social y comportarnos como todos esperan que lo hagamos puede darnos cierta sensación de calma y estabilidad, a la larga puede convertirse en un problema más que importante de conciencia.

La lealtad a uno mismo: ¿cómo te afecta en la vida?

Puesto que en temas de salud mental no hay verdades absolutas, optar por ser fieles a nosotros mismos, nuestras creencias y la forma en que consideramos que debemos actuar nos hará reconciliarnos con nuestro yo más auténtico, y eso es bueno, pero también nos obligará a pagar los costes emocionales e interpersonales que lleva asociados.

Ser fiel a uno mismo, a lo que sentimos, a lo que pensamos, y a nuestros valores, es crucial para el bienestar emocional y para la salud mental, pero, aunque no lo parezca, también nos puede acarrear unos costes emocionales importantes.

Ser fiel a ti mismo: ¿un precio demasiado alto para pagar?

El psicólogo sanitario Ignacio Sanz, de Estarcontigoterapia.es, expone claramente los frentes que nos esperan si decidimos ser fieles a nosotros mismos por encima de todas las cosas. Por un lado, ser congruente con quienes somos, nos va a llevar muy probablemente a conflictos interpersonales. Al final, ser fiel a uno mismo es una manera de poner el foco en nosotros y cuidarnos, lo que está abocado a que pongamos límites para protegernos o que nos prioricemos en situaciones que nos pueden hacer daño.

El hecho de ponernos nosotros por delante nos va a llevar a tener discusiones con otras personas, o incluso a llegar a perder relaciones. Algo inevitable y, quizá, beneficioso, como dice el experto: Las discusiones o los encontronazos por ser fiel a mí, se pueden solucionar, arreglar o negociar. Sin embargo, si perdemos una relación o a una persona por ser fiel a nosotros mismos (que no es lo mismo que ser egoísta), porque el otro no lo acepta, quiere decir que esa relación no nos hacía mucho bien.

La autorrealización: ¿cómo ser fiel a ti mismo sin traicionarte?

Antes de enfrentarnos a la decisión de defender nuestra libertad individual debemos tener claro y afrontar que muchas personas nos darán la espalda. Además de los conflictos que puede generarnos con respecto a nuestro entorno, que no esté de acuerdo con nuestra decisión o no le guste, ser fiel a ti misma va a tener también un coste emocional.

Ser fiel a nosotros puede obligarnos a atender esas emociones que pueden ser dolorosas, pero que no van a dejar de ser mías solo por el hecho de ignorarlas. Por ejemplo, ser fiel a mí mismo puede ser tomar conciencia de que no soy feliz, o me siento triste en mi relación de pareja. Aunque me dé miedo afrontarlo, eso va a seguir estando ahí.

El segundo psicólogo entrevistado, Buenaventura del Charco Olea, autor de los libros 'Te estás jodiendo la vida' y 'Hasta los cojones del pensamiento positivo', pone el foco en nuestra preocupación constante por el resultado de las acciones que llevamos a cabo, antes que en ser leales a nosotros mismos.

El bienestar psicológico no está tan influido por el resultado de las cosas como por la sensación de congruencia y honestidad con nosotros mismos, con aquello que sentimos y pensamos. Este concepto se denomina 'ajuste' (es decir, que lo que expresamos, actuamos y pensamos se ajusta a nuestra percepción y vivencia de las cosas).

Al fin y al cabo, la decisión está en el tejado de cada uno: o elijo evitar el dolor a costa de perder mi libertad como individuo, con lo cual me estoy traicionando, o asumo con valentía las situaciones incómodas que genera ser fiel a mí mismo.

Así pues, ser honestos tendrá beneficios a largo plazo, y hay que ver la salud mental más allá del aquí y el ahora.