¿Es conveniente activar el punto muerto al parar en un semáforo?

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¿Es conveniente activar el punto muerto al parar en un semáforo?

En el ámbito del tráfico, una de las dudas más comunes entre los conductores es si es conveniente activar el punto muerto al parar en un semáforo. Esta práctica, también conocida como neutro, consiste en desacelerar el vehículo y pasar a la marcha neutral antes de detenerse completamente. Aunque puede parecer una medida inocua, la cuestión es objeto de debate entre expertos y conductores. En este artículo, analizaremos los pros y contras de activar el punto muerto al parar en un semáforo y proporcionaremos recomendaciones prácticas para una conducción segura y eficiente.

Poner punto muerto al parar en un semáforo: ¿Es realmente necesario?

En los coches con cambio manual, es necesario pisar el embrague y meter una marcha para que comiencen a circular por las carreteras de España. Sin embargo, a la hora de frenar y detenerse, por ejemplo, ante un semáforo, también hay que volver a pisar el embrague y reducir las marchas. En este punto, surge la duda de si poner el punto muerto una vez detenido o seguir con la primera marcha metida.

El punto muerto al detenerse: ¿Es conveniente o no?

El punto muerto al detenerse: ¿Es conveniente o no?

Cuando nos encontramos parados frente a un semáforo en rojo, da igual estar detenido con el punto muerto puesto o tener la primera marcha embragada. Sin embargo, si vamos a estar detenidos en un tiempo superior a los 30 segundos que dura un semáforo de forma habitual, sí que es conveniente dejar el coche en punto muerto, ya que se pueden producir problemas en el embrague por tenerlo tanto tiempo pisado.

Por ejemplo, en las autoescuelas recomiendan dejar la marcha metida al parar en un semáforo, ya que así es más fácil salir, y no existe tanto riesgo de que el coche se cale. Pero, ¿qué pasa si dejas el coche en punto muerto?

Al contrario de lo que piensan muchos conductores, al circular en punto muerto se produce un mayor gasto en combustible. Además, dejar el coche en punto muerto significa dejarlo a merced de la inercia, lo que puede suponer un gran peligro para la seguridad vial si este coge mucha velocidad en una pendiente.

Por otro lado, dejar al coche sin una marcha engranada se traduce en que es mucho más difícil frenar, debido a que no actúa el freno motor. Además, si se pisa el freno en punto muerto, las pastillas y los discos sufrirán más, por lo que se desgastarán antes.

En cuanto a los coches con caja de cambios automática, presentan algunas desventajas. Además del incremento en el consumo de combustible y los mayores costes de reparación asociados con estas transmisiones, también es común que los vehículos equipados con caja de cambios automática tengan un precio más elevado en el mercado automotriz español.

Además, los cambios automáticos no permiten aprovechar el freno motor, lo que reduce la necesidad de cambiar las pastillas de freno con frecuencia. Por último, la capacidad de maniobra de los automóviles con transmisión automática tiende a ser menos suave y precisa, ya que no disponen de embrague, lo que afecta acciones como estacionar.

Patricia Martínez

Hola, soy Patricia, autora en El Noticiero. Me apasiona compartir las noticias más relevantes de actualidad, tanto a nivel nacional como internacional. Mi compromiso con la objetividad y la rigurosidad en la información es mi principal prioridad. ¡Te invito a descubrir las últimas novedades junto a mí en este periódico independiente!

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