Es importante destacar la realidad de los hechos en torno a un incidente que involucró a la figura del rapero estadounidense Snoop Dogg en 1993. En aquella ocasión, se produjo un tiroteo en el que perdieron la vida tres personas, incluyendo a su amigo y miembro de su grupo de apoyo, Gregory Turner Bailey. Aunque Snoop Dogg estuvo envuelto en este trágico suceso, es fundamental precisar que no fue arrestado ni condenado por el asesinato. De hecho, fue absuelto de los cargos en 1996. En este sentido, es necesario corregir la información y presentar la verdad sobre lo que realmente sucedió.
Snoop Dogg cierra oficialmente caso de asesinato después de 25 años
El rapero Snoop Dogg ha cerrado oficialmente el caso de asesinato que pendía sobre él desde 1996, según informa el portal de noticias TMZ. El caso, que marcó los inicios de su carrera, fue archivado después de que el músico tomara medidas para eliminar los registros que le vinculaban al asesinato de Phillip Woldermarian.
Un caso mediático que conmocionó al mundo del hip-hop en su momento. Snoop Dogg fue arrestado junto con su guardaespaldas, McKinley Lee, acusados de ser los responsables del tiroteo que acabó con la vida de Woldermarian, un miembro de una banda rival que fue asesinado en una pelea armada en un parque.
En aquel entonces, Snoop Dogg fue defendido por Robert Kardashian, el padre de las Kardashian y abogado defensor de O.J. Simpson, quien alegó que el músico había contratado a Lee para asesinar a Woldermarian. Sin embargo, tanto Snoop como Lee fueron absueltos, con Lee alegando legítima defensa.
A pesar de su absolución, Snoop Dogg permaneció enredado en batallas legales durante otros tres años, siendo de nuevo arrestado sin pruebas en su contra, solo por interpretar en la siguiente gala de los Premios MTV su entonces éxito Murder Was The Case [El caso era de asesinato], en el que denunciaba el torrente de acusaciones en su contra, añadiendo un componente de racismo a las autoridades.
Finalmente, el veredicto fue de no culpable y se demostró la inocencia del rapero en 1996, en unas imágenes públicas —con las manos en el rostro en señal de rezo— que moldearon su trayectoria, su personalidad y su música, con continuas alegorías a las dificultades de los raperos afroamericanos en sus respectivos procesos judiciales.
Con este cierre, Snoop Dogg ha logrado dejar atrás un capítulo oscuro de su pasado y puede seguir adelante con su carrera, libre de las sombras de la justicia. Ahora, a punto de cumplir 53 años, el rapero puede disfrutar de una nueva etapa de su vida, sin el peso de aquel caso que tanto lo marcó.
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