Fallece Teófanes Egido, el fraile erudito que descubrió el origen converso de Santa Teresa de Ávila
Con gran pesar, la comunidad científica y religiosa lamenta el fallecimiento del fraile dominico Teófanes Egido, un erudito y reconocido experto en la vida y obra de Santa Teresa de Ávila. Egido, que falleció a los 89 años, se destacó por sus investigaciones pioneras sobre la vida de la santa, y especialmente por su descubrimiento sobre el origen converso de la misma. Su trabajo, que arrojó nueva luz sobre la figura de Santa Teresa, ha sido ampliamente reconocido y valorado por la comunidad académica y religiosa. A lo largo de su carrera, Egido publicó numerous obras sobre la santa y su época, convirtiéndose en una autoridad en la materia.
Fallece Teófanes Egido, historiador y fraile que descubrió la ascendencia judía de Santa Teresa
El historiador y fraile carmelita Teófanes Egido, especializado en el siglo XVI, ha fallecido este miércoles en Valladolid a los 88 años. Egido fue un gran conocedor de dicha época y documentó el linaje judeoconverso de Santa Teresa, uno de sus descubrimientos más destacados.
Fue catedrático emérito de la Universidad de Valladolid y primer cronista oficial de la democracia en la ciudad de Valladolid. En su investigación, Egido rastreó en el Archivo de la Real Chancillería de Valladolid un pleito de hidalguía del que se hizo eco el escritor y académico Narciso Alonso-Cortés, hasta demostrar la ascendencia judía de la monja reformadora.
Además de su investigación sobre Santa Teresa, Egido también dedicó buena parte de sus estudios a Martín Lutero, traduciendo sus obras al español. También estudió figuras claves del XVI como Teresa de Jesús, San Juan de la Cruz, Carlos V y Felipe II, lo que le permitió ofrecer nuevas perspectivas de interpretación.
Desde su cátedra, Egido se erigió en España como uno de los referentes de la historia de las mentalidades, una forma de analizar la historia que explica el pasado desde ángulos diferentes. En este sentido, aplicó sus estudios a la Inquisición, el protestantismo y la piiedad popular.
En 2001, después de su jubilación y tras ser nombrado catedrático, el Ayuntamiento de Valladolid le nombró cronista oficial de la ciudad, el primero de la última etapa democrática iniciada en 1975.
Su empeño como docente, investigador e historiador le valió el Premio Castilla y León de Ciencias Sociales 2020, que le acreditó públicamente como maestro de historiadores.
La muerte de Teófanes Egido es una gran pérdida para la comunidad historiográfica y académica, pero su legado y contribuciones a la historia serán recordados y estudiados durante mucho tiempo.
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