La Fiscalía ha solicitado una condena de más de 50 años de prisión para el exentrenador del club de fútbol Varea, quien enfrenta acusaciones de abusos sexuales cometidos contra varias víctimas. Según la acusación, el exentrenador aprovechó su posición de autoridad y confianza para cometer estos delitos, aprovechando la vulnerabilidad de sus víctimas. La solicitud de la Fiscalía es consecuencia de una investigación exhaustiva que ha revelado una serie de pruebas contundentes que demuestran la responsabilidad del acusado en los delitos cometidos. Ahora, la justicia deberá determinar la responsabilidad del exentrenador y dictar una sentencia que refleje la gravedad de sus acciones.
La Fiscalía pide condena de más de 50 años de prisión por abusos sexuales a menores
La Fiscalía ha pedido una pena de más de 50 años de prisión para el exentrenador del Varea de Logroño, quien también trabajó como ojeador del Osasuna, por presuntos abusos sexuales a ocho menores cuando trabajaba en este club de la capital riojana.
Según informa el periódico El Día de La Rioja, la Fiscalía ha tomado en consideración el informe policial sobre este caso, en el que solo un menor denunció al que era su entrenador. El ministerio público considera la existencia de diferentes delitos cometidos sobre las víctimas, como pornografía infantil, descubrimiento de secretos, abusos sexuales y acoso a menores a través de internet.
En este caso, también se ha personado una acusación particular, que solicita 12 años de prisión para el técnico. Los investigadores del caso consideran que el exentrenador hacía valer su condición de ojeador de un club de Primera División, el Osasuna, para prometer a los menores que podrían ir a jugar a ese equipo.
La Fiscalía considera que el exentrenador cometió estos delitos cuando trabajaba en el club de fútbol Varea de Logroño, aprovechando su posición de poder y confianza para cometer estos abusos. La Fiscalía pide una pena de más de 50 años de prisión para el exentrenador, considerando la gravedad de los delitos cometidos y el daño causado a las víctimas.
Este caso es un ejemplo más de la importancia de la lucha contra la explotación y el abuso de menores. Es fundamental que se tomen medidas para proteger a los niños y niñas de estos delitos y que se castigue severamente a los responsables.
La justicia debe actuar con firmeza en estos casos y dar ejemplo a la sociedad de que no se tolerará este tipo de conductas. La condena solicitada por la Fiscalía es un paso importante en la lucha contra la explotación y el abuso de menores.
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