En un escenario geopolítico cada vez más tenso, Israel ha decidido intensificar su presencia militar en la frontera con Líbano, ante la creciente preocupación por la amenaza de Irán de lanzar un ataque masivo en la región. La situación de conflicto en la zona se ha vuelto cada vez más crítica, ya que la tensión entre Teherán y Jerusalén ha alcanzado niveles nunca antes vistos. La comunidad internacional observa con preocupación los movimientos de Israel, que busca fortalecer su capacidad de defensa ante la posibilidad de un ataque iraní que podría desestabilizar toda la región. En este contexto, la estabilidad en Medio Oriente se encuentra en juego, y la comunidad internacional espera con ansiedad el desarrollo de los eventos en las próximas horas.
La frontera entre Israel y Líbano se vuelve un foco de conflicto ante la creciente amenaza iraní
La situación en la frontera entre Israel y Líbano se ha vuelto crítica en las últimas horas debido a la amenaza de Irán y sus aliados. El humo se eleva en la frontera entre ambos países como resultado de los misiles disparados desde el Líbano en la parte norte de los Altos del Golán anexados.
La incertidumbre sobre un posible ataque a gran escala de Irán y sus aliados mantiene a Israel en la zozobra desde hace una semana, mientras se intensifica el intercambio de fuego entre las fuerzas israelíes y el grupo chií libanés Hizbulá, pese a que la comunidad internacional se esfuerza por evitar una escalada en Oriente Medio.
Irán y sus aliados juran vengarse
Irán ha dejado claro que quiere atacar más que objetivos militares, según el portavoz del Gobierno israelí, David Mencer. Perderá más de lo que gana si lo hace, advirtió. El líder de Hizbulá, Hasan Nasrala, confirmó que su milicia va a responder y que lo mismo harán Irán y Yemen.
Hace justo una semana, el Ejército israelí realizó un ataque en las afueras de Beirut que mató al máximo líder militar de Hizbulá, Fuad Shukr. Más tarde, un ataque en Teherán -que las autoridades iraníes atribuyen a Israel- resultó en la muerte del líder político del grupo islamista Hamás, Ismail Haniyeh. Desde entonces, Irán y sus aliados del llamado 'Eje de Resistencia' han jurado vengarse.
Guerra diplomática
Algunos de los aliados más estrechos de Israel, que se preparan para ayudarle a repeler el posible ataque iraní, están presionando a las autoridades israelíes para limitar su respuesta a la anunciada agresión. Los aliados, liderados por Estados Unidos, han recordado a Israel que el objetivo es evitar una guerra regional, por lo que debe ser comedido en su respuesta.
Por su parte, la diplomacia de Israel está alertando a la esfera internacional sobre su legitimidad para responder a los posibles ataques de Irán y Hizbulá. El presidente estadounidense, Joe Biden, llamó este martes al emir catarí, Tamim bin Hamad Al Thani, y al presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, para abordar el modo de desescalar el conflicto en Oriente Medio y lograr un acuerdo de tregua en la guerra que Israel mantiene desde el 7 de octubre con Hamás.
Escalada en la frontera Israel-Líbano
El intercambio de fuego entre las fuerzas israelíes y Hizbulá ha recrudecido en las últimas horas. El grupo chií lanzó drones y más de una treintena de cohetes que dejaron 19 heridos en el norte de Israel, además de incendios que los bomberos aún tratan de extinguir.
Entre los heridos están un hombre en estado crítico y una mujer en condición moderada, víctimas de la caída de un interceptor israelí que erró en su trayectoria e impactó en la localidad árabe de Maazra, cerca de Nahariya, a unos 10 kilómetros de la divisoria con el Líbano.
Las autoridades locales de Nahariya y otras poblaciones aledañas han pedido a sus habitantes que permanezcan cerca de los búnkeres antiaéreos, mientras que el Comando del Frente Interior de Israel no ha emitido ninguna orden especial a los civiles.
La comunidad internacional llama a la calma
Numerosos países han pedido a sus ciudadanos que abandonen Líbano por temor a una escalada, mientras el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, habló este lunes con sus homólogos de los países del G7 para advertirles de que se podría producir un inminente ataque de Irán y Hizbulá contra Israel.
Jordania sigue inmersa en una serie de llamadas telefónicas a diferentes líderes regionales e internacionales con el objetivo de presionar para evitar una escalada, y Alemania abogó por evitar otra guerra en Oriente Medio.
La ONU dice que nueve trabajadores de la UNRWA pudieron estar involucrados en los ataques de Hamás. Con 350 drones y misiles, Irán lanzó un ataque directo e inédito contra territorio israelí a mediados de abril pasado en represalia por el bombardeo contra el consulado iraní en Damasco.
Esperamos que la situación se resolva pacíficamente y sin más derramamiento de sangre. La comunidad internacional debe unirse para evitar una escalada en Oriente Medio.
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