Jerusalén mantiene el nivel de alerta máxima y se prepara para una posible respuesta después de la crisis con Irán.

Jerusalén mantiene el nivel de alerta máxima y se prepara para una posible respuesta después de la crisis con Irán.

En un clima de tensión máxima, la ciudad de Jerusalén se encuentra en alerta máxima en respuesta a la reciente crisis con Irán. Después de una serie de incidentes diplomáticos y amenazas verbales, las autoridades israelíes han decidido tomar medidas de seguridad adicionales para proteger a la población civil y a los intereses nacionales. Según fuentes oficiales, se están realizando preparativos para una posible respuesta militar en caso de que la situación empeore. La comunidad internacional mira con preocupación el desarrollo de los eventos, mientras que los líderes políticos buscan una solución pacífica para evitar un conflicto a gran escala.

Jerusalén mantiene alerta máxima ante posibles represalias de Irán después de ataque en Teherán

Las autoridades israelíes han decidido mantener la alerta máxima en el país después de un ataque atribuido a Israel en Teherán que mató al líder político del grupo islamista palestino Hamás, Ismail Haniyeh. El ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, ha mantenido una reunión con la cúpula militar y de inteligencia del país para analizar posibles acciones en el caso de un ataque iraní o de sus satélites.

Israel se prepara para una posible respuesta iraní después de ataque que mató a líder de Hamás

El primer ministro israelí, Bejamín Netanyahu, ha asegurado durante una ceremonia que Irán intenta rodear con su yugo del terror, pero que Israel está dispuesto a enfrentarse a la república islámica en cualquier frente, lejos o cerca.

Las defensas aéreas israelíes no son herméticas, por lo que la población debe mantenerse alerta, según el portavoz del Ejército, el contralmirante Daniel Hagari. Pese a ello, no se han realizado cambios en el nivel de alerta militar.

Tensión en la región: Israel mantiene alerta máxima y cancela vuelos en aeropuerto de Tel Aviv

Ante las conjeturas por la posible respuesta iraní, una veintena de aerolíneas ha cancelado o retrasado sus vuelos hacia y desde Israel en los últimos días, lo que se ha traducido en una merma de unos 10.000 pasajeros en el aeropuerto Ben Gurion de Tel Aviv.

La Cúpula de Hierro israelí repele un aluvión de cohetes lanzados desde Líbano. En total, el principal aeropuerto israelí ha atendido este domingo unos 55.000 pasajeros, entre salidas y entradas.

En un intento por calmar la situación, el ministro de Exteriores de Jordania, Ayman Safadi, viajará este lunes a Irán para mantener una reunión con su homólogo iraní. Además, el responsable del Comando Central estadounidense (CENTCOM), el general Michael Kurilla, llegó este sábado a Israel para tratar la crisis regional.

Mientras tanto, Israel mantiene su dura ofensiva en la Franja de Gaza, donde más de una treintena de palestinos ha perdido la vida en las últimas horas, según la Defensa Civil del enclave.

El grupo islamista Hamás aseguró que sigue trabajando para recuperar cuerpos entre los escombros de dos escuelas que fueron bombardeadas este domingo en la ciudad de Gaza, en el norte de la Franja. En ambos centros se refugiaban miles de desplazados.

Las fuerzas armadas israelíes confirmaron por su parte haber atacado la escuela Hasán Salame, en el oeste de la capital gazatí, así como la escuela Naser, también ubicada en Ciudad de Gaza, por tratarse de dos centros de mando utilizados por los milicianos palestinos.

Según el Ejército, Hamás utilizaba ambos complejos para ocultar a sus combatientes y para planear ataques contra las tropas. Antes del ataque se tomaron numerosas medidas para mitigar el riesgo de dañar a civiles, incluido el uso de municiones precisas, vigilancia e inteligencia adicional, han asegurado las autoridades israelíes.

La situación en la región sigue siendo tensa, con la expectativa de una posible escalada de violencia en los próximos días.