En el marco de la formación de un nuevo gobierno en Cataluña, Junts adopta una postura de espera y observación ante el preacuerdo alcanzado entre ERC (Esquerra Republicana de Catalunya) y PSC (Partit dels Socialistes de Catalunya). Según fuentes cercanas a la formación liderada por Carles Puigdemont, si el acuerdo es aprobado, Salvador Illa, líder del PSC, sería el próximo presidente de la Generalitat. Sin embargo, Junts advierte que, en ese caso, Illa conllevará todas las consecuencias de sus decisiones, lo que sugiere una clara distancia entre ambas formaciones políticas. A la espera de conocer los detalles del preacuerdo, Junts se mantiene firme en su posición, sin desechar la posibilidad de un acuerdo, pero también sin comprometerse con una alianza que no garantice los intereses de la formación independentista.
Expectación y críticas en Junts sobre el preacuerdo entre ERC y PSC para investir a Illa
La presidenta de Junts, Laura Borràs, llegó a una reunión de la ejecutiva de Junts el pasado 30 de julio de 2024 en Barcelona, con el fin de analizar el preacuerdo entre ERC y el PSC para investir a Salvador Illa como presidente de la Generalitat.
La reunión, convocada por Junts, finalizó después de hora y media de reunión sin ninguna valoración, ya que los miembros de la formación no tuvieron acceso al documento del preacuerdo. Este aspecto ha sido objeto de críticas por parte de la formación del expresidente catalán, Carles Puigdemont.
Jordi Turull, secretario general de la formación, señaló ante los medios este martes que la única certeza que tenemos es que si la militancia de ERC lo avala (el preacuerdo), Salvador Illa será presidente, con todo lo que eso conlleva.
La reunión de Junts se celebró en un ambiente de expectación y crítica, ya que la formación no había tenido acceso al documento del preacuerdo y, por lo tanto, no podía evaluar la viabilidad del mismo.
La falta de transparencia en el proceso de negociación entre ERC y PSC ha generado desconfianza entre los miembros de Junts, que consideran que la formación de Salvador Illa como presidente de la Generalitat puede tener consecuencias importantes para el futuro político de Cataluña.
En este sentido, la crítica de Jordi Turull se centra en la falta de participación de Junts en el proceso de negociación y en la falta de transparencia en el contenido del preacuerdo.
La situación política en Cataluña se encuentra en un momento de gran incertidumbre, y la formación de un nuevo gobierno depende de la aprobación del preacuerdo entre ERC y PSC.
La reunión de Junts ha dejado más preguntas que respuestas, y la formación seguirá exigiendo más información y transparencia en el proceso de negociación para investir a Salvador Illa como presidente de la Generalitat.
Se sigue esperando una respuesta clara y transparente por parte de ERC y PSC sobre el contenido del preacuerdo y su viabilidad para el futuro político de Cataluña.
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