La ASPE alerta de que una remuneración muy insuficiente puede generar un éxodo de profesionales de la sanidad pública

La ASPE alerta de que una remuneración muy insuficiente puede generar un éxodo de profesionales de la sanidad pública

La Asociación de Profesionales de la Sanidad Española (ASPE) ha lanzado una alerta sobre el riesgo de un éxodo masivo de profesionales de la sanidad pública debido a la remuneración muy insuficiente que reciben. Según la ASPE, la situación económica de los profesionales de la salud en España es preocupante, lo que puede generar una fuga de talentos hacia otros países o sectores laborales más atractivos. Esta situación tendría consecuencias graves para el sistema sanitario público, que ya sufre una carga asistencial importante. La ASPE exige medidas urgentes para abordar esta problemática y garantizar la sostenibilidad del sistema de salud.

La ASPE advierte: remuneración insuficiente puede generar un éxodo de profesionales de la sanidad pública

La Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE) advierte del problema que supone el nuevo concierto de MUFACE para la asistencia médica de los funcionarios. Piden que se acuerde una prima por mutualista similar a los gastos sanitarios de los ciudadanos.

Según la ASPE, si no se garantiza la accesibilidad a los servicios sanitarios de todo el territorio y se remunera de forma insuficiente, existe el riesgo de que los funcionarios elijan menos la sanidad privada. Esto llevaría a un potencial aumento de las listas de espera.

Limitaciones en la prestación de servicios

La patronal avisa que es importante que se deje de limitar la prestación de servicios más frecuentados, como oncología o los tratamientos de diálisis. El incremento de la prima por parte de MUFACE debe ir dirigido a garantizar un cuadro médico en todo el territorio y que los mutualistas reciban un servicio de calidad, destaca Carlos Rus, presidente de ASPE.

Revalorización de la prima

La alianza pide que la revalorización de la prima se traslade de forma justa y efectiva a los centros. Avisan que si se mantiene la diferencia entre el precio por mutualista y el recibido por aseguramiento, se desincentivará a los proveedores. De ello depende, para ASPE, que el cuadro médico sea más restrictivo.

La financiación insuficiente ha generado una situación insostenible, afectando la accesibilidad del mutualista a la atención sanitaria, destaca la patronal en un comunicado. Se debe considerar la situación de los prestadores de asistencia sanitaria, que son los que, en definitiva, atienden los costes derivados de la atención sanitaria de los mutualistas, afirma Carlos Rus.

Diferencia en las tarifas

La alianza explica que las tarifas de los usuarios del mutualismo administrativo son un 10% inferiores a los asegurados por compañías de salud, lo que hace que el desajuste aumente. Esta diferencia está causada por la edad avanzada de los mutualistas y el aumento de la frecuencia asociada, lo que ha llevado a que muchos centros dejen de atender a los mutualistas.

El informe de la Cátedra de Salud Sostenible de la Universidad Complutense, El mutualismo administrativo: Modelo predictivo sobre la elección de los mutualistas y escenarios futuros, estima que solo han trasladado el 50% de subida de la prima a los prestadores. En el caso de centros más pequeños este traslado puede que sea sensiblemente inferior.

Propuesta de aumento de la prima

Para ASPE la propuesta de aumentar un 24% la prima de MUFACE en 2025 es un paso en buen camino. A pesar de ello, advierte que está cifra no es suficiente para la viabilidad del modelo.

La alianza subraya la necesidad de equipar la prima con el gasto sanitario real por ciudadano, que se sitúa en 1.608 euros. Si no se logra una financiación verdaderamente adecuada que incluya a todos los actores, el modelo sigue en riesgo de desaparecer, asegura el presidente de ASPE.

Actualmente, este modelo ahorra al Estado más de 890 millones de euros y su desaparición supondría para la sanidad pública un impacto de más de 1.000 millones. Además, esta situación provocaría un incremento de más del 260% en las listas de espera para consultas externas.