La banca logra mantener la morosidad a niveles históricos en quince años, a pesar de la caída del tipo de interés del euríbor

La banca logra mantener la morosidad a niveles históricos en quince años, a pesar de la caída del tipo de interés del euríbor

En un contexto de incertidumbre económica, la banca española ha logrado un logro destacado al mantener la morosidad en niveles históricos durante quince años consecutivos. Esta tendencia positiva se ha producido a pesar de la caída del tipo de interés del euríbor, lo que podría haber generado un aumento en la incapacidad para pagar de los deudores. Sin embargo, la prudencia crediticia y la mejora en la gestión de riesgos por parte de las entidades financieras han permitido mantener bajo control la morosidad, lo que supone un alivio para la economía y un reflejo de la solidez del sistema financiero.

La banca logra mantener la morosidad a niveles históricos pese a caída del euríbor

La banca española ha logrado mantener la morosidad a mínimos de quince años, a pesar de la caída del euríbor, según los datos del Banco de España (BdE). El volumen de crédito dudoso ha cerrado el mes de julio en el 3,42%, lo que supone su nivel más bajo desde diciembre de 2008, cuando ascendía al 3,37%.

La tasa de morosidad ha encadenado dos meses consecutivos a la baja, después de situarse en junio en el 3,43% y se reduce desde el 3,5% que marcaba hace justo doce meses. Esta evolución obedece al menor saldo de dudosos, que se contrae en más de 1.326 millones, influida a su vez por las mayores amortizaciones anticipadas.

El freno del euríbor también contribuye de forma positiva, lo que da un respiro a los hipotecados. Durante el séptimo mes de 2024, el índice de referencia en el mercado hipotecario experimentó un retroceso de más de doce puntos básicos, situándose en el 3,5%, cifra que se ha seguido moderando. Cuando queda una semana para terminar septiembre, éste ya se mueve por debajo del 3%.

Aunque la institución ofrece el dato agregado, también separa por bancos, cajas y cooperativas, que pasa desde el 3,39% al 3,31%, mientras que los impagos de los establecimientos de crédito al consumo escalan ligeramente dos décimas al 6,64%.

La banca mantiene la morosidad a raya, lo que supone un alivio para la economía española. La reducción de la morosidad es un indicador positivo para el sector financiero y para los consumidores, ya que significa que hay menos deuda impagada y más confianza en la capacidad de pago de los clientes.