- La diminuta localidad cordobesa que esconde un tesoro dentro de un inmenso paisaje de olivares
- Un lugar escondido en el sur de Córdoba
- Una rica historia
- Un yacimiento ibero-romano con 3.500 años de historia
- El aceite de oliva, un tesoro de Baena
- La Cueva del Yeso, una rareza geológica
- La Semana Santa, una fiesta única
La diminuta localidad cordobesa que esconde un tesoro dentro de un inmenso paisaje de olivares
En el corazón de la provincia de Córdoba, se encuentra una pequeña localidad que guarda un secreto invaluable. Entre el inmenso paisaje de olivares que caracteriza a esta región, se esconde un tesoro que pocos conocen. La localidad de la que hablamos es un verdadero oasis en el que la historia y la naturaleza se unen para ofrecer un experiencia única. A continuación, descubriremos los secretos que esconde esta localidad cordobesa y por qué es un destino turístico imprescindible para cualquier amante de la naturaleza y la cultura.
El tesoro de Baena, un pueblo cordobés que combina historia y naturaleza en un paisaje de olivos
Un lugar escondido en el sur de Córdoba
A tan solo una hora al sur de Córdoba y un poco más desde Granada, se esconde Baena, una pequeña localidad que destaca por su belleza discreta y su autenticidad. Una postal en blanco y verde que representa la esencia más pura de Andalucía.
Una rica historia
Pasaron por Baena iberos, romanos, visigodos y musulmanes, dejando una huella imborrable gracias a la cual hoy puede presumir de un gran patrimonio lleno de contrastes. Su castillo, que domina el pueblo desde lo alto, es un recordatorio de su importancia estratégica en tiempos de la Reconquista.
El casco antiguo, con sus calles estrechas y empinadas, invita a perderse en un recorrido donde cada rincón revela una parte de su larga historia. La iglesia de Santa María la Mayor, de estilo gótico-mudéjar, y la Casa del Monte, una muestra de la arquitectura civil, destacan entre los principales monumentos que no puedes dejar de visitar junto al emblemático yacimiento ibero-romano de Torreparedones.
Un yacimiento ibero-romano con 3.500 años de historia
La zona de Torreparedones estuvo ocupada por el hombre desde los tiempos más remotos, al menos durante 3.500 años, y por varios pueblos que dejaron su huella en diferentes materiales que hoy se siguen estudiando y se pueden ver, con objetos de cerámica, vidrio, piedra y metal.
El aceite de oliva, un tesoro de Baena
Ya hace siglos que el aceite de oliva es uno de los grandes tesoros de Baena y eso no solo se ve reflejado en el paisaje, formado por hileras de olivos que llegan hasta donde alcanza la vista. El aceite de oliva virgen extra que allí se produce cuenta con Denominación de Origen propia y está considerado como uno de los mejores de España, lo que también ha ayudado a poner a Baena en el mapa.
El Museo del Olivar y del Aceite de Baena alberga una almazara cuya maquinaria data de mediados del siglo XIX. Su sabor y calidad es el resultado de siglos de tradición olivarera, algo que se aprecia en las almazaras locales, muchas de ellas abiertas al público, donde se puede conocer más sobre el proceso de producción, desde la recolección de la aceituna hasta la extracción de este auténtico oro líquido.
La Cueva del Yeso, una rareza geológica
Otra de las maravillas que atesora Baena es su Cueva del Yeso, la cuarta cueva yesística de mayor dimensión en España. Con más 220 millones de años de antigüedad, es una auténtica rareza geológica a ocho kilómetros de Baena, en el paraje conocido como Puente de la Maturra.
La Semana Santa, una fiesta única
Si hay una fecha que en Baena no pasa desapercibida esa es la Semana Santa. Declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional, lo que la hace única es el personaje del Judío, que inunda de sonido y color las calles de Baena desde la madrugada del Miércoles Santo.
Así que, si en esta temporada no te quedan días libres para conocer Baena, es una buena opción que puedes ir pensando para Semana Santa.
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