La inclusión en la comunidad: la importancia de crear 'espacios de la calma' para personas con autismo

La inclusión en la comunidad: la importancia de crear 'espacios de la calma' para personas con autismo

En el camino hacia la inclusión social, es fundamental crear entornos que permitan a las personas con autismo sentirse cómodas y seguras. Uno de los desafíos más importantes es diseñar espacios de la calma, áreas específicas que brinden un ambiente tranquilo y organizado para aquellos que lo necesitan. Estos espacios son clave para que las personas con autismo puedan participar plenamente en la vida comunitaria, ya que les permiten regular sus sentidos y reducir el estrés. La creación de estos espacios es un paso crucial hacia la integración total de las personas con autismo en la sociedad, y es en este sentido que nos enfocamos en explorar la importancia de diseñar entornos que fomenten la inclusión y la accesibilidad.

Crear 'espacios de la calma' para personas con autismo: clave para la inclusión en la comunidad

El Grupo de Consultoría Autista (GCA) del Proyecto Rumbo defiende la creación de salas de baja estimulación sensorial, también conocidos como 'espacios de la calma', como elementos clave para que las personas con autismo y sus familias puedan disfrutar de los entornos comunitarios y participar en sus actividades.

Según Autismo España, estos espacios son salas tranquilas donde cualquier persona que lo necesite puede tomarse un tiempo para relajarse. La existencia de este tipo de lugares puede determinar que un evento, entorno o lugar sea accesible para las personas con autismo y sus familias, ofreciéndoles la oportunidad de sentirse cómodas y disfrutar, como el resto de la población.

La importancia de 'espacios de la calma' para personas con autismo y sus familias

Los expertos del GCA, compuesto por cinco personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA) y una mediadora, consideran que muchos espacios públicos y privados siguen siendo entornos hostiles para el colectivo. No tienen en cuenta las características y necesidades sensoriales de las personas autistas y sus familias, pues en ellos hay luces brillantes o fluorescentes, ruido, aglomeraciones, olores intensos, etcétera.

Los expertos destacan que el beneficio de crear este tipo de espacios va más allá de las personas del colectivo autista, también puede ser un refugio para cualquiera que necesite descansar.

Características ideales de los 'espacios de la calma'

El GCA ha recopilado una serie de herramientas y consejos para crear estos espacios, sobre los que recomienda que estén:

• Insonorizados
• Iluminados de forma tenue
• Pintados de colores neutros
• Equipados con mobiliario cómodo y minimalista

Además, se sugiere que estos espacios incorporen materiales como objetos sensoriales antiestrés, elementos para sentarse cómodamente, materiales táctiles agradables, masajeadores y instrumentos canceladores de ruido.

Es importante que el aforo sea limitado, no excediendo la presencia de siete personas a la vez, y que la duración de la estancia en estas salas esté en torno a 20 minutos, con la flexibilidad que cada persona requiera.

El Grupo de Consultoría Autista también recomienda que los 'espacios de la calma' cuenten con la presencia de una o dos personas dinamizadoras, con formación en autismo y en primeros auxilios, y que se establezcan normas de conducta, como respetar a los demás, apagar los aparatos electrónicos y permanecer en silencio.

Es fundamental que el 'espacio de la calma' esté perfectamente señalizado con indicaciones accesibles y claras y que incluya apoyos visuales para facilitar la comprensión de todas las personas.

Por último, es importante evaluar el grado de satisfacción del espacio y las posibilidades de mejora, mediante cuestionarios personales en lenguaje claro y lectura fácil, en diferentes formatos.

La creación de 'espacios de la calma' es un paso hacia la inclusión y la accesibilidad para las personas con autismo y sus familias, y puede ser beneficioso para cualquier persona que lo necesite.