La luz alumbra un problema: comunidades de vecinos descubren que están pagando por servicios que no les corresponden

La luz alumbra un problema: comunidades de vecinos descubren que están pagando por servicios que no les corresponden

Una sorprendente revelación ha sacudido a various comunidades de vecinos en todo el país, quienes han descubierto que vienen pagando por servicios que no les corresponden. A través de una exhaustiva investigación, se ha encontrado que muchos propietarios de viviendas han estado abonando cantidades millonarias a empresas de servicios públicos por conceptos que no les pertenecen. Esta situación ha generado un gran malestar entre los afectados, quienes exigen respuestas y soluciones inmediatas. En las próximas líneas, analizaremos este problema y exploraremos las posibles consecuencias y soluciones para aquellos que se han visto afectados por esta situación.

Vecinos pagan por electricidad que no les corresponde: el autoconsumo colectivo puede ser un problema

El autoconsumo eléctrico permite a cualquier persona o empresa producir y consumir su propia electricidad instalando paneles solares fotovoltaicos u otros sistemas de generación renovable en su hogar, local o comunidad de vecinos. Sin embargo, en el caso del autoconsumo colectivo, se está dando una paradoja: propietarios que han apostado por instalar placas solares para ahorrar en la factura de la luz están pagando peajes por electricidad que no proviene de la red exterior.

La Unión Española Fotovoltaica (UNEF) alerta sobre el problema

La asociación recuerda que el autoconsumo colectivo en red interior no debe pagar los peajes correspondientes a la energía que se comparte en la red interior. En el caso del autoconsumo colectivo, la generación se reparte bajo acuerdo de los distintos integrantes y se le asigna una proporción (coeficiente beta) a cada vecino.

En contra de la principal ventaja del autoconsumo, se está dando un escenario en el que se paga por electricidad que no se consume. Por ejemplo, dos vecinos (A y B) se reparten la generación según un acuerdo de reparto al 50%. Conjuntamente generan 10 kilovatios hora (kWh) por lo que a cada uno le corresponde 5 kWh de generación individualizada. Al mismo tiempo, A consume 2 kWh y B gasta 7 kWh, así que en conjunto consumen 9 kWh. Por lo tanto, A autoconsume 2 kWh y le sobran 3 kWh de excedentes que no aprovechan otros consumidores y B consume 7 kW de los cuales actualmente 5 kWh se consideran autoconsumo y 2 kWh se consideran consumidos de la red.

Estos 2 kWh que se consideran consumidos de la red en realidad provienen de los 3 kWh de excedentes que sobran al vecino A, pero no se reconocen de esta forma.

La solución: coeficientes dinámicos

Desde la UNEF se propone implementar 'coeficientes dinámicos' para que solo se paguen peajes y cargos por los kWh que de verdad vienen de la red. Estos 'coeficientes dinámicos' permiten que se paguen peajes y cargos solo por la electricidad que viene de fuera de la red, pero no se paguen por la electricidad que le sobra al vecino que no llega a aprovechar toda su generación.

Nosotros proponemos que se considere el conjunto de la instalación para ver si es netamente consumidora o generadora, y que solo se paguen peajes por la electricidad que verdaderamente proviene de la red, explica Héctor de Lama, director técnico de UNEF.

Cómo instalar placas solares en tu comunidad

Instalar paneles para el aprovechamiento fotovoltaico para usos comunes requerirá el voto favorable de la mayoría simple de los propietarios, que, a su vez, representen la mayoría simple de las cuotas de participación. El precio de la instalación dependerá de varios factores, como el tamaño, la ubicación de la comunidad, y la calidad de los paneles.

Aunque la inversión inicial puede parecer elevada, a largo plazo, la instalación de paneles solares puede ser muy rentable. El pago de la instalación en comunidad de vecinos se repartirá entre todos aquellos que quieran disfrutar de energía más eficiente y sostenible, reduciendo el coste de amortización y la cuota de cada vecino.

Las instalaciones de autoconsumo compartido instaladas en las comunidades de vecinos se amortizan en periodos que van de los cinco a los ocho años, pudiendo llegar a generar un ahorro de hasta el 70% en el consumo eléctrico.