En un repentino giro de los eventos, la modelo española Laura Escanes ha reaccionado con enfado ante la invasión de su privacidad y la de su familia. La razón de su indignación es la proliferación de fotografías no autorizadas de su hija, tomadas por paparazzi que no dudan en vulnerar la intimidad de la menor. La modelo, conocida por su belleza y su estilo, ha exigido respeto hacia su familia y ha lanzado un llamado a la reflexión sobre los límites que deben establecerse entre la vida pública y la privada. No somos monos de feria, respeten nuestra privacidad, ha sido el mensaje contundente que la modelo ha lanzado a los medios de comunicación y a la opinión pública.
Laura Escanes se enfrenta a la parte menos agradable de la fama en Disneyland París
La popular influencer y presentadora de TV3, Laura Escanes, viajó a Disneyland París con su hija Roma y una amiga para disfrutar de un fin de semana mágico en la cuna de los cuentos de hadas. Sin embargo, la experiencia no fue del todo perfecta, ya que la fama trajo consigo un lado menos agradable.
Qué bonito este viaje, qué bonito este viaje con Roma y qué bonito ese viaje con una amiga, que nuestras hijas tengan la misma edad y sean amigas. Gracias por estos recuerdos para siempre, compartió la creadora de contenido en Instagram, acompañando su mensaje con unas tiernas fotos junto a Mickey Mouse y su hija convertida en una princesa Disney.
Es importante destacar que, a pesar de que su pequeña ha sido la auténtica protagonista de sus publicaciones, Laura Escanes ha optado por no mostrar el rostro de su hija en ninguna de ellas, manteniendo así su intimidad.
La frustración de Laura Escanes
Precisamente, el motivo de su reciente enfado se debe a quienes, al reconocerla en el popular parque temático, le tomaron fotografías a ella y a su hija sin su consentimiento. No iba a comentarlo, pero creo que está bien que lo haga porque, así, espero que no vuelva a ocurrir, ha advertido Escanes a través de stories, dirigiéndose a sus seguidores.
La creadora de contenido ha destacado que, en ciertas situaciones, como cuando lleva a la niña en brazos o está en medio de una comida, se niega a hacerse fotos, si bien, generalmente, le hace mucha ilusión hacerlo al permitirle poner cara a sus fans. Es cuestión de empatía, ha sentenciado.
No más fotos sin consentimiento
Laura Escanes ha sido clara al manifestar que no va a volver a consentir que en lugares públicos haya alguien grabándome o sacándome fotos desde la distancia. No sé si por cotilleo, por vergüenza, de no pedirme una foto a mí o por qué motivo, pero, por favor, no somos monos de feria y se me hace superincómodo. Sobre todo, cuando estoy con la niña, ha sentenciado.
Según ha relatado, su frustración con este tipo de situaciones incómodas fue tal que, este fin de semana, decidió tomar cartas en el asunto y pidió a las personas que la fotografiaban disimuladamente que borraran las imágenes, ya que su hija aparecía en ellas. Creo que tampoco es que esté pidiendo algo extraordinario. Creo que es cuestión de educación y empatía, ha concluido, visiblemente molesta.
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